El GNC ya no está tan lejos de la nafta y baja el interés por la conversión

Pese al incremento continuo de la nafta en el último año y medio, el interés de los platenses por la conversión de vehículos a gas natural comprimido (GNC) no subió: más bien, decayó. La explicación de la aparente paradoja es que subió todo: la brecha entre combustibles se acortó y también inciden el costo del equipo y la instalación.

Héctor, dueño de un taller especializado en la instalación de gas de última generación, ubicado en la zona de diagonal 74 y 21 reconoció la caída en las consultas.

“Los automovilistas hoy no se inclinan por la conversión a GNC, porque la nafta cuesta alrededor de 1.300 pesos y el gas 680 pesos, un poquito más de la mitad. La diferencia no es el 5 por ciento del valor de la nafta como llegó a suceder en algún momento”, explicó.

Pasar un auto naftero a gas con un equipo de quinta generación y un cilindro de 60 litros sale alrededor de 1.400.000 pesos, promedio. El tanque tiene una autonomía aproximada de 150 kilómetros.

En cuanto a la ecuación de costo y ahorro, cargar un tanque de 60 litros ronda los 16 mil pesos y equivale a unos 15 litros de nafta, según la explicación que brindó a este diario el especialista en el tema. Mientras que con GNC el costo no superaría los 8 mil pesos. Es decir, la mitad.

Si bien en la ecuación el uso de gas aún significa un ahorro, el costo de la colocación “es muy caro y hay que hacer muchos kilómetros para amortizar la inversión”, consideró.

En este contexto, las consultas para la conversión registran un fuerte retroceso. “La demanda bajó prácticamente a cero. Se hacen una o dos conversiones por mes, cuando antes se hacían 20”, indicó.

taxi y remís

Todavía requieren instalación quienes trabajan con el vehículo, como los taxistas, remiseros y conductores independientes que prestan el servicio de viajes por medio de alguna aplicación.

Juan Carlos Berón, titular del Sindicato de Conductores de Taxis de La Plata, explicó que en el caso de su sector “conviene mucho más el uso de GNC. Casi nadie anda a nafta, salvo por apuro cuando se quedan sin gas”.

Traducido en números, indicó que sobre la recaudación diaria, la carga de gas equivale a un 10 por ciento.

Eso se duplica si el coche tiene motor naftero. “En el caso de la nafta es de entre el 20 y el 25 por ciento, porque es más cara y gasta más cantidad”, indicó el dirigente.

Sector estacionero

En las estaciones de servicio también se registra una inclinación de los automovilistas por la nafta.

El presidente de la Federación de Entidades de Combustible de la Provincia de Buenos Aires, Juan Carlos Basílico, sostuvo que “en algún tiempo anduvo bien y ahora se lo quiere reactivar, porque se dice que Vaca Muerta va a tener gas, motivo por el cual quieren ver si se impulsa la comercialización. Pero la gente dejó de inclinarse por esta opción porque no deja de ser peligrosa”, analizó el empresario platense y directivo en el sector del expendio de combustible.

Por su parte, entre los estacioneros de la Ciudad se consideró que el GNC no está siendo rentable, porque el costo de la energía aumentó mucho y a comparación de otros años hay menos vehículos que mantienen la conversión.

A esto se le suma el impacto negativo de los cortes de gas en invierno, donde las estaciones de servicio tienen un límite de venta. “Esto cansa a los clientes”, se aseguró.