Alerta escorpiones: buscan crear un mapa y fabricar suero

Investigadores del Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores (CEPAVE) y el Instituto Biológico Tomás Perón buscan usar el veneno de los escorpiones que habitan en nuestra región y el territorio bonaerense como bioinsumo para desarrollar un suero contra los efectos de su picadura a fin de abastecer la demanda provincial. Para ello trabajan con alacranes hallados por vecinos tanto en el área metropolitana como en el interior bonaerense, en base a los cuales están generando un mapa con la distribución de aquellos que resultan peligrosos para la salud.

“La idea es armar este mapeo en cada municipio que esté interesado en trabajar con el proyecto” explica el doctor Sergio Rodríguez Gil, el director del proyecto. La iniciativa -que cuenta con apoyo de la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia (CIC)- tiene por base el bioterio de escorpiones del CEPAVE, ubicado en el campus de la Universidad Nacional de La Plata. Allí se crían mas de 500 alacranes de diversas especies capturados en todo el territorio provincial para experimentación.

“En el CEPAVE nos encargamos de garantizar la obtención del veneno”, explica la médica veterinaria Ana Paola Miceli, quien comenta que al comenzar el proyecto apenas contaban con veinte ejemplares y, gracias a los aportes de vecinos, hoy tienen en el Centro, entre vivos y muertos, cerca de un millar.

La otra parte del trabajo, el ordeñe del veneno, se lleva a cabo en el Instituto Biológico “Tomás Perón”. Este se le inyecta en pequeñas dosis a caballos, lo que genera en ellos una reacción inmunológica gracias a la cual, tras una extracción de sangre, se obtiene el suero hiperinmune.

Si bien existen investigaciones realizadas en diversos países que sugieren que el veneno de escorpión podría tener utilidad también como analgésico y para el tratamiento de ciertas enfermedades, “en nuestro caso el objetivo a muy largo plazo es generar el suero de manera sintética”, aclara Rodríguez Gil.

¿VENENOSOS Y PELIGROSOS?

Aunque tiende a creerse que algunos escorpiones son venenosos y otros no, lo cierto es que “todos transmiten veneno por su aguijón”, aunque “no todos son peligrosos para las personas”, explica Rodríguez Gil.

Según su picadura afecte seriamente la salud de las personas o no, las especies de escorpiones se dividen en peligrosas y no peligrosas, algo que no siempre resulta fácil de determinar. “Para alguien persona que acaba de sufrir una picadura es muy difícil diferenciar a simple vista si el escorpión es peligroso o no en ese momento de estrés”, señalan desde la CEPAVE donde recomiendan acudir siempre a un hospital.

Otra falsa creencia que se ha generalizado en torno a los escorpiones tiene que ver con las estrategias para erradicarlos de nuestro hogar. “La fumigación sólo favorece al desalojo de los refugios pero no acaba con el problema. El escorpión se va porque le desagrada el olor de los químicos fumigantes, pero a los pocos días regresa. Es como correr el problema a la casa de al lado”, comenta el investigador.

“Las picaduras siempre se dan por accidentes. El animal nunca va a atacar, sino que se defiende cuando lo tocan porque se siente amenazado. La sensación de la picadura es como la de una anestesia. Y si el veneno es de tipo no peligroso, a las seis horas como mucho deja de doler”

Sergio Rodríguez Gil Director del proyecto

De ahí que en el CEPAVE enfatizan la importancia de que las escuelas no fumiguen cuando encuentran alacranes, sino que en su lugar coloquen kits para atraparlos.

“El animal nunca va a atacar, sino que se defiende cuando lo tocan porque se siente amenazado“, dice Rodríguez Gil, quien explica que la picadura no pasa desapercibida porque es muy dolorosa. “La sensación es como una anestesia y, en caso de que el veneno no sea peligroso -agrega-, a las seis horas como mucho deja de doler”.

Si bien no todas las picaduras son peligrosas para las personas, ¿qué pasa con las mascotas? “El tratamiento con suero es exclusivo para uso en seres humanos. Si un perro o un gato son picados por escorpión no hay una forma determinada de curarlos”, reconoce Ana Miceli, quien aclara que, por la protección de su pelaje, esto no suele suceder.

EL MAPEO

La realización de un mapa con la distribución de las especies de escorpiones en la Provincia, el otro objetivo del proyecto, es una tarea que los investigadores llevan adelante en coordinación con los municipios. En la zona de La Plata, donde se encuentra el centro de investigación, hay reportes de las especies Tityus carrilloi y T. confluens. “Eso no significa que no haya otras especies que no estén declaradas”, aclara Miceli.

En Quilmes, el mapeo de las zonas donde había alacranes, sirvió para hacer campañas de prevención segmentadas en barrios sin necesidad de alertar a toda la población. “Como resultado indirecto de este trabajo el Municipio ahorró mucho presupuesto en fumigación”, cuenta el director del proyecto.

Tras haber mapeado las localidades de Ramallo y San Nicolás, donde aseguran que existe una gran diversidad, el equipo del CEPAVE está trabajando actualmente en el municipio de Chacabuco para determinar las zonas donde más escorpiones hay . “La idea es armar el mapa en cada municipio que esté interesado para trabajar en la prevención”, explica Rodríguez Gil.