La Casa Curutchet pasa a manos de los arquitectos: ¿cuánto invertirán por la obra de Le Corbusier?

Tras una extensa espera, el colegio de Arquitectos de la provincia de Buenos Aires concretó la compra de la Casa Curutchet, un emblema de la Ciudad referido a la obra de Lecorbusier. La firma de la escritura se realizó la semana pasada, según informaron en la entidad profesional.

El colegio de Arquitectos provincial aceleró con la compra de la histórica casa de bulevar 53 entre 1 y 2 desde fines del año pasado, tras la aprobación de la adquisición del inmueble en una asamblea de los profesionales de los distintos distritos que componen la entidad.

“Miles de imágenes de momentos compartidos con ustedes vienen a mi mente y a mi corazón en este momento histórico. Pero quiero ser justo: lo primero es agradecer a la conducción del Consejo Superior del CAPBA –encabezada por su presidente Ramón Rojo, su vicepresidente Alejandro Latorre, la secretaria Silvia Safar y el tesorero Claudio Videla- por haber tomado esta decisión, acompañados de cientos y cientos de arquitectas y arquitectos que la apoyaron y ratificaron en Asambleas de cada Distrito de nuestro Colegio provincial durante 2024”, describió el arquitecto Julio Santana, director de la Casa Curutchet.

Todo comenzó en 2010, con las primeras charlas en la que participó el arquitecto Adolfo Canosa -entonces presidente del CAPBA- en las que se propuso generar un Plan que intentara colocar a la Casa Curutchet a la altura de lo que es: una obra maestra de la arquitectura universal, resaltan los profesionales.

En 2011 se propusieron incluir a la Casa Curutchet en la Lista de Patrimonio Mundial de la Unesco, logro que se obtuvo en 2016, junto a numerosas instituciones y otros dieciséis sitios ubicados en siete países del mundo, guiados por la Fondation Le Corbusier.

El colegio de Arquitectos bonaerense en 1991 -entonces presidido por Daniel Delpino- decidió alquilar la casa para que sea la primera sede provincial de la entidad profesional.

Según pudo saber este diario, la operación inmobiliaria se realizó con los descendientes del doctor Pedro Curutchet, (una de sus hijas y tres nietos) y significa el desembolso de unos 2 millones de dólares (libre de gastos de escritura para la parte vendedora) que se afrontan con un crédito de la Caja de Previsión a la que pertenecen los arquitectos (CAAITBA, que comparten otras profesiones: agrimensores, ingenieros y técnicos) y fondos excedentes y de libre disponibilidad que tiene el Consejo Superior del CAPBA por un total de 853.300 dólares.

Tras este paso de la compra hay proyectos con planes de modificaciones del entorno de la histórica casa para transformar esa zona de la Ciudad en un espacio de mayor acceso para la comunidad.