De la fumata blanca al "Habemus Papam": quién anunciará al nuevo Papa

La fumata blanca de la chimenea de la Capilla Sixtina a las 18:08hs. hora de Roma anunció a los más de 1.400 millones de fieles y a todo el mundo que fue elegido un nuevo Obispo de Roma, sucesor de Pedro.

El anuncio del nombre del nuevo Papa, pronunciado después del “Habemus Papam”, desde la Logia de las Bendiciones de la Basílica de San Pedro estará a cargo del cardenal protodiácono francés Dominique Mamberti.

Desde el sitio oficial del Vaticano se indica que "según lo establecido y regulado por el Ordo Rituum Conclavis y la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, un cardenal presente en la Capilla Sixtina ha alcanzado la mayoría requerida, y la elección se ha realizado canónicamente. El primero de los cardenales por orden y antigüedad —o, si él es el elegido, el segundo—, en nombre de todo el Colegio de Electores, ha preguntado en latín al elegido: "¿Aceptas tu elección canónica como Sumo Pontífice?" Y, apenas recibido el consentimiento, le ha formulado la pregunta: "¿Con qué nombre deseas ser llamado?".

Posterior a esta situación, el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, quien actúa como notario y en presencia de dos ceremonieros como testigos, redacta un documento que certifica la aceptación del nuevo Pontífice y el nombre que ha elegido.

Tras su paso por la "Sala de las Lágrimas", donde viste por primera vez como Papa, el Sumo Pontífice electo regresa a la Capilla Sixtina, donde celebra una breve ceremonia, que inicia con un saludo del cardenal decano del Orden de los Obispos.

A continuación, el primero de los cardenales presbíteros proclama un pasaje del Evangelio, que puede ser: “Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia” o “Apacienta mis ovejas”, y luego el cardenal protodiácono eleva una oración por el recién elegido Sucesor de Pedro.

Después, todos los cardenales electores presentes, según el orden de precedencia, pasan ante el nuevo Papa para manifestarle su homenaje y obediencia. Finalmente, todos entonan juntos el himno del Te Deum, iniciado por el nuevo Pontífice.

Mientras tanto, el cardenal protodiácono, Dominique Mamberti, se dirige a la Logia de las Bendiciones para anunciar públicamente la elección y el nombre del nuevo Papa con la fórmula: “Annuntio vobis gaudium magnum: habemus Papam!", "Anuncio una gran alegría: habemus Papam!”. Mientras se realiza este anuncio, el Papa electo, camino a la Logia, se detiene brevemente en la Capilla Paulina, donde ora en silencio ante el Santísimo Sacramento. Luego continúa hacia la Logia, desde donde dirige su primer saludo al mundo e imparte la bendición apostólica Urbi et Orbi.