El delito obligó a una joven a huir de su casa y le volvieron a robar

La creciente ola de inseguridad que atraviesa nuestra ciudad sumó un nuevo episodio: una mujer de 30 años y vecina de Ringuelet denunció que le vaciaron la vivienda de la que planeaba mudarse este mes debido a los reiterados robos en la zona. Lo llamativo y preocupante es que se produjo apenas un día después de haber sufrido un primer escruche en la misma propiedad mientras estaba ausente.

Es decir, por segunda vez en menos de 48 horas, la joven fue víctima del delito. Según pudo saber EL DIA basándose en fuentes policiales, la damnificada había decidido no pasar la noche en la vivienda por temor a un nuevo ataque, luego de que delincuentes forzaran una reja del frente y se llevaran una bicicleta, dinero y otros objetos personales. Sin embargo, cuando volvió al otro día, descubrió que habían vuelto a ingresar y que esta vez le habían vaciado gran parte del inmueble.

Este reciente golpe delictivo, que ocurrió en una casa ubicada en calle 5 bis entre 515 bis y 516, volvió a encender las alarmas por el nivel de vulnerabilidad con que se cometen estos ataques.

Según se informó, la mujer había comenzado recientemente el proceso de mudanza a esa propiedad, aunque todavía no residía allí de forma permanente. La noche anterior al robo, ante la primera irrupción, prefirió alojarse en la casa de una amiga por miedo a sufrir otra “visita” de los delincuentes. Su temor no era infundado.

Lo cierto es que cuando regresó, ayer por la mañana, observó que una de las rejas del frente del domicilio estaba forzada. Al ingresar al lugar y recorrer el pasillo lateral que conecta con el fondo del inmueble, advirtió también que otra ventana —correspondiente a un cuarto que utilizaba como depósito— había sido violentada.

Lo peor se confirmó: en las inmediaciones había elementos desparramados, señal de que los delincuentes habían ingresado por allí. También, conmocionada, notó que otra reja, de una ventana interna que da al interior de la casa, había sido forzada.

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Le llevaron de todo

Ante la evidencia de un nuevo robo, la víctima llamó inmediatamente al 911. Personal policial se hizo presente en el domicilio y, tras verificar que no quedaban ladrones en el interior, la damnificada constató el faltante de numerosos objetos de valor. Entre los elementos sustraídos, la pesquisa detalló que se llevaron “una heladera, un quemador industrial de cerámica, binoculares, una minipimer, una hidrolavadora y un caloventor chico, entre otros electrodomésticos.

Además, según detallaron, la mujer detectó que faltaba un juego de llaves que había quedado colocado en una puerta de la vivienda, lo que alimenta la sospecha de que los delincuentes habrían utilizado esa vía para retirarse con el botín, en lugar de salir por las ventanas forzadas. La casa, de acuerdo a su relato, quedó completamente revuelta.

Cabe mencionar que el primer robo que sufrió había sido el miércoles por la mañana, alrededor de las 8:30. En base a su testimonio, fue su vecino quien la alertó tras advertir que la reja de la ventana del frente estaba forzada. En ese momento, ella se encontraba en Capital Federal. Al llegar, comprobó el daño y notó el faltante de una bicicleta, dinero en efectivo y otros elementos. Esta situación la llevó a buscar refugio en lo de una amiga, sin imaginar que el mismo domicilio sería atacado nuevamente tan solo unas horas después.

La doble irrupción en el mismo domicilio, con apenas un día de diferencia y en ausencia total de los moradores, expone una preocupante falta de control en una zona cada vez más castigada por los hechos de inseguridad.