Otro ataque sorpresa: Ucrania dañó un puente de Rusia

El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) aseguró ayer que en una operación especial dañó los cimientos del puente de Kerch, que une la península de Crimea con la Rusia continental. Al parecer, hizo explotar 1.100 kilogramos de explosivos colocados bajo el agua.

“La planificación de la operación duró varios meses. Agentes del SBU colocaron minas en los cimientos de esta estructura ilegal. Y hoy (por ayer), sin ninguna baja entre la población civil, el primer explosivo fue activado”, indicó el SBU en un comunicado, acompañado de un video y una foto del puente dañado.

Según indicó el SBU, se trata del tercer ataque ucraniano desde el comienzo de la guerra contra este puente construido por el presidente ruso, Vladimir Putin, después de la anexión por parte de Rusia de la península ucraniana de Crimea en 2014.

💥💥+++EILT: Ukraine attackiert Krimbrücke +++ Absolute rote Linie Russlands überschritten +++ Jetzt droht totale Eskalation

Der ukrainische Geheimdienst SBU bestätigte, dass die Ukraine heute um 04:44 Uhr einen Brückenpfeiler der Kertschbrücke mit einer Unterwasserdrohne… pic.twitter.com/jsjcIRm2A4

— AUF1 (@AUF1TV) June 3, 2025

El jefe del SBU, Vasil Maliuk, supervisó personalmente la operación. Maliuk dijo en el comunicado que “el puente de Crimea es un objetivo absolutamente legítimo”, al haber sido construido para unir Rusia a un territorio ucraniano ocupado y por servir, además, como “arteria logística para el suministro” al Ejército ruso.

“Crimea es Ucrania y cualquier expresión de la ocupación recibirá una respuesta contundente”, remató Maliuk. Por su parte, las autoridades rusas de Crimea han informado que el paso por el puente está temporalmente interrumpido.

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En tanto, un ataque ruso golpeó la ciudad ucraniana de Sumy, donde mató al menos a tres personas y dejó muchos heridos, según dijeron las autoridades. El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, condenó el ataque y dijo que subraya que Moscú no tiene intenciones de detener la guerra después de más de tres años.

Los servicios secretos de Ucrania, por su parte, dijeron que habían atacado de nuevo en la retaguardia de Rusia, dos días después de un espectacular ataque con drones ucranianos en bases aéreas dentro de Rusia.

Según las autoridades ucranianas, una andanada de cohetes impactó en edificios de departamentos y una instalación médica en el centro de la ciudad nororiental, al día siguiente de que las conversaciones de paz directas no lograran avances para poner fin a la guerra de más de tres años. Las delegaciones de los países en guerra se reunieron en Estambul el lunes y acordaron intercambiar soldados muertos y heridos, pero sus términos para poner fin a la guerra seguían estando muy alejados.

Zelenski afirmó que el ataque a Sumy fue un “golpe completamente deliberado contra civiles” y que uno de los cohetes atravesó la pared de un edificio de departamentos pero no estalló. “Los rusos golpearon brutalmente Sumy, apuntando directamente a la ciudad, a las calles corrientes, con artillería de cohetes”, dijo el mandatario. “Eso es todo lo que necesitan saber sobre el ‘deseo’ de Rusia de terminar esta guerra”, escribió el presidente ucraniano en una publicación en Telegram. Asimismo, apeló a la presión global y a la “acción decisiva de Estados Unidos, Europa y todos en el mundo que tienen poder”; sin ella, dijo, el presidente ruso Vladimir Putin “no aceptará ni siquiera un alto el fuego”.

La guerra ha matado a más de 12.000 civiles ucranianos, según Naciones Unidas, así como a decenas de miles de soldados de ambos lados a lo largo de los aproximadamente 1.000 km del frente, donde la guerra de desgaste continúa a pesar de los esfuerzos liderados por Estados Unidos para negociar un acuerdo de paz.