La leña, un 100 % más cara: desde $200 mil para pasar el invierno

En menos de tres semanas comienza el invierno y en la Ciudad, la tarea de templar el hogar gana terreno. Las opciones -aparatos a gas o eléctricos, aires acondicionados, calderas, salamandras o estufas hogar, entre otras- varían según la ubicación, el bolsillo y el tipo de mobiliario.

En el casco urbano, los artefactos a gas son los más elegidos por la accesibilidad a la red pero, en la periferia, prima el uso de los artefactos eléctricos o la calefacción a leña para combatir las bajas temperaturas.

La falta de gas natural principalmente en barrios de la periferia local, no es el único argumento para explicar el uso de esta calefacción.

La tradición, secar el ambiente, eliminar la humedad, el olor ahumado, la duración del clima templado, y principlamente el precio en relación a la calidad, son las diferentes razones del ascenso en el consumo de la leña.

“Nosotros vivimos en una zona que se usa bastante calefacción a leña porque no tenemos gas natural. Pero estamos hace mucho tiempo acá y para la mayoría, esta forma de calentar el hogar es un tradición”, contó un frentista de Sicardi, en diálogo con EL DIA. “Creo que sabiéndola manejar, la leña dura bastante y es una opción más económica ante los aparatos eléctricos, como los aires acondicionados”, sumó.

PRECIOS Y RENDIMIENTO

En las leñeras de la Ciudad se vende itin y quebracho blanco o colorado: las dos especies son madera dura y ofrecen una mayor lapso de encendido. El precio oscila entre $24.000 y $32.000 los 100 kilogramos; entre $120.000 y $150.000 los 500 kilos; y entre $240.000 y los $290.000 la tonelada, es decir, los 1.000 kilos.

También se comercializa el eucaliptus colorado, una madera que prende más rápido pero dura menos que el quebracho o el itin. Los 100 kilogramos cuesta entre $20.000 y $22.000; los 500, $100.000; y la tonelada, a partir de $200.000.

El año pasado, los valores llegaban a la mitad del precio actual.

Lo cierto es que el aumento de la leña superó ampliamente la inflación interanual -de abril 2024 a abril 2025- que, según el Indec, fue del 47,3 por ciento.

Asimismo, es necesario contemplar los diferentes formas de calefaccionar con leña. Están los artefactos que pueden instalarse en cualquier ambiente -teniendo en cuenta el tamaño y la salida al exterior-, y están aquellos dispositivos pensados para espacios más amplios.

En este sentido, el uso de la leña depende del uso y de la temperatura. Unos 100 kilos de leña ocupan un volumen de un metro cúbico y, con ello, se podría mantener encendida una estufa mediana las 24 horas durante una semana.

Por temporada invernal, un hogar puede utilizar un promedio de 450 kilos de leña pero, si las temperaturas son muy bajas o perduran los días de frío, ese promedio puede ascender a una tonelada.

EL CONSUMO

En una leñera de Gonnet, ubicada en avenida 25 entre 505 y 506, expresaron que se vende leña “todo el año” y que la gente opta por la compra pequeña: “El cliente viene una vez por semana y lleva entre 50 y kilos”, detalló un vendedor.

En consonancia, en una leñera de Sicardi ubicada en 10 y 650, ocurre algo similar: “Hay mucha gente que vienen a comprar para el día y otros que tratan de almacenar un poco. Pero hoy, la mano está complicada entonces priman las compras pequeñas y diarias”, contó el dueño.