No aparece el conductor del auto que causó la tragedia en 66 y 29

UNA FOTO FAMILIAR DE JUAN CARLOS FIGUEROA, EL HOMBRE QUE MURIÓ TRAS SER ATROPELLADO EN 66 Y 29

El caso del jubilado que falleció en la zona de Parque Castelli, tras ser atropellado por un auto, cuyo conductor se dio a la fuga, sigue provocando conmoción entre sus familiares y amigos.

Tal como adelantó en exclusiva este diario en su edición anterior, la víctima, de 67 años, habría sido embestido por un Renault 18 familiar en las calles 66 y 29.

De los ocupantes del vehículo, que según algunos trascendidos serían dos personas mayores de edad, todavía no se tiene ningún dato.

“HABIA SALIDO A HACER MANDADOS”

Juan Carlos Figueroa, la víctima del siniestro fatal, era vecino de más de 40 años de la cuadra de 29 entre 67 y 68.

Todavía consternados por lo sucedido, algunos de sus allegados repasaron las circunstancias en las que ocurrió el accidente trágico.

“Había salido a hacer mandados, poco después de las nueve de la mañana, aprovechando que estaba lindo el día”, contaron en el barrio.

En las últimas horas surgieron algunos trascendidos que señalan que habría un segundo vehículo involucrado en el hecho.

“Dicen que un camión, que sería de la Municipalidad, estaba justo parado en el lugar, afectado a la recolección de residuos, y pudo obstruirle la visión, tanto a Juan Carlos , como al que manejaba el auto”, contó un vecino.

La misma persona agregó que “misteriosamente, los del camión también desaparecieron”.

Al parecer, “el impacto fue tal, que el hombre terminó tirado a varios metros de donde lo chocaron”, se lamentó el frentista.

El barrio en el que Figueroa pasó la mayor parte de su vida, fue uno de los puntos más afectados por el temporal que, días atrás, sacudió a la Ciudad y dejó a su paso un reguero de muerte.

En ese marco, varios vecinos recordaron que el jubilado ya había sufrido hace sólo 20 días el terrible trauma de haber “perdido todo” durante las inundaciones.

“Acá hubo casi dos metros de agua”, describieron.

Figueroa había trabajado hasta hace pocos años también en su barrio: era enfermero del hospital San Juan de Dios.

En el círculo íntimo de la víctima prefirieron no formular mayores declaraciones a la prensa, al margen de que sí dieron a conocer una fotografía familiar.

Sólo trascendió que, con la compañía de los allegados más cercanos, en medio de escenas de profunda consternación y dolor, ayer le brindaron el último y sentido adiós.

En tanto, a más de 36 horas del accidente, el conductor del auto que atropelló al jubilado permanecía prófugo, al menos hasta el cierre de esta edición.

Respecto de los motivos que provocaron esa actitud, un vocero del caso supuso que “seguramente se dio cuenta de que el hombre estaba muy mal y por eso escapó”.

En este contexto, las filmaciones de las cámaras de Monitoreo Público se convirtieron ahora en un elemento fundamental para seguir el rastro del acusado de provocar el siniestro.

“Estamos haciendo todos los trabajos que corresponden en una situación así, pero hasta el momento no pudimos dar con el responsable del accidente”, explicaron los pesquisas.

Con esos datos, también se pidió colaboración al Registro Nacional de la Propiedad del Automotor, para seguir la pista del conductor del auto, del que sólo se conoce la finalización de la patente en 868, precisaron los voceros.