Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
El país |ANALISIS

No fue la economía... se pagó en las urnas el costo del “vamos por todo”

Esta vez, el electorado parece haber privilegiado cuestiones institucionales

13 de Agosto de 2013 | 00:00
LA GENTE NO PARECE HABER VOTADO NI CON EL BOLSILLO NI INFLUIDA POR LOS MEDIOS.  LOS ANALISTAS DESTACAN EL PESO DE LA CUESTIÓN INSTITUCIONAL
LA GENTE NO PARECE HABER VOTADO NI CON EL BOLSILLO NI INFLUIDA POR LOS MEDIOS. LOS ANALISTAS DESTACAN EL PESO DE LA CUESTIÓN INSTITUCIONAL

Esta vez la gente no parece haber votado con el bolsillo. Es cierto que hay factores de la economía que preocupan al ciudadano medio: la inflación, el peso del impuesto a las Ganancias, las dificultades para acceder al crédito y el cepo al dólar, que ha complicado hasta a los jóvenes que querían viajar a Brasil por la visita del Papa. Pero esta vez, en el resultado parecen haber influido más cuestiones de orden institucional. Y más concretamente, el temor a que un sector se quedara finalmente “con todo”.

Un analista resumía así la explicación del fuerte retroceso que sufrió el kirchnerismo en estos comicios: “El gran culpable es el que inventó el slogan `vamos por todo`. Eso metió miedo en una ciudadanía que ha madurado democráticamente, que cree en los equilibrios y que no quiere que nadie se quede con todo en el país”.

También está claro que no fueron los medios los que determinaron el resultado electoral. El oficialismo ha contado con el apoyo explícito de una fuerte y diversificada red de medios televisivos, gráficos y radiales que potenciaron su mensaje electoral en esta última campaña. Por otra parte, ya se había visto en las fuertes protestas callejeras como la del 18A, que la gente respondía a convocatorias espontáneas, gestadas en las redes sociales, sin un llamado que fuera potenciado antes a través de la prensa.

Por eso surge con más claridad que fue la sensación creada por el “vamos por todo” la que explicaría, de alguna forma, el resultado de esta elección en la que el kirchnerismo fue derrotado en los principales distritos y en muchos en los que creía que conservaría su hegemonía, como Santa Cruz o Jujuy.

UN ESCENARIO INEDITO

En cada región del país se han votado candidatos de distintas fuerzas. Y se ha conformado así un paisaje político multicolor, con una diversidad que no registra prácticamente antecedentes en la Argentina. El peronismo opositor se ha afirmado en la provincia de Buenos Aires y en Córdoba; el radicalismo ha recobrado vigor con un contundente triunfo en Mendoza; la llamada centroderecha ratificó su liderazgo en la capital federal; el socialismo lo hizo en Santa Fe; la centroizquierda también revivió en el distrito porteño, donde dirimió una atractiva interna que ha logrado potenciarla. El Frente para la Victoria, como primera minoría a nivel nacional, cosechó sólo el 26% (cuando en 2011 arañó el 54 y en 2009, aún perdiendo en Buenos Aires, había superado el 30%).

Este escenario plantea un desafío de convivencia y de interacción entre dirigentes de distintas fuerzas que no se había dado antes en el país.

El paisaje que dibuja esta elección abre, por eso mismo, algunos interrogantes. La Argentina no tiene experiencia en la cohabitación política, o la que tiene es muy frágil. Esto no sólo exige esfuerzos de tolerancia y de diálogo, sino también la definición de objetivos comunes.

Se ha conformado un paisaje político multicolor, con una diversidad que no registra antecedentes en la Argentina

Hasta hace pocos años, las mayorías automáticas se imponían en todos los frentes. El peso de los aparatos partidarios era determinante; había “feudos” impenetrables en los que, elección tras elección, el resultado era cantado. La crisis y debilitamiento de los partidos, pero al mismo tiempo la madurez cívica que ha adquirido la ciudadanía, determinan una movilidad política que se convierte en la característica principal del nuevo mapa institucional de la Argentina.

Ha quedado otra vez en evidencia que los mecanismos de “voto selectivo”, a través del corte de boletas, se imponen como una tendencia cada vez más fuerte. El votante medio se ha acostumbrado a combinar distintas fuerzas políticas en su voto. Ya no se mete boleta completa a ciegas. Se distingue entre las elecciones nacionales, provinciales y municipales. Y a pesar de las dificultades de la lista sábana, se premia y se castiga a determinados sectores por su gestión o administración.

Con matices y con preferencias distintas, los grandes centros urbanos del país -aún los del Conurbano- votaron en contra del oficialismo nacional. Los analistas creen que en ese comportamiento también han influido varios escándalos de corrupción que pusieron al Gobierno en una situación por lo menos incómoda. Los casos de la ex Ciccone; de Lázaro Báez y de Jaime pueden haber tenido gravitación en algunos segmentos del electorado.

OTROS ESLABONES

Han habido otros hechos que implicaron costos políticos para el Gobierno: el acuerdo con Irán por el caso AMIA ha sido difícil de explicar y de entender; la reforma que se pretendió imponer en la Justicia y que terminó frenada por la Corte también contribuyó a una sensación de cierta amenaza institucional que, evidentemente, tuvo correlato en las urnas.

No son pocos los que creen que también influyó la certeza de algunos sectores medios de que un resultado más o menos favorable le hubiera dado bríos al Gobierno para forzar una reforma constitucional que habilitara la re reelección. Y frente a esa posibilidad, se le ha puesto un límite.

Por supuesto, puede haber otros factores y seguramente otras interpretaciones. Pero el dato cierto es que el Gobierno ha sufrido, entre el deslumbrante triunfo electoral de 2011 y esta derrota en los principales distritos electorales del país, un retroceso enorme. ¿Por qué? Como se dijo: porque el “vamos por todo” parecía, desde su propia formulación, reclamar un límite.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$135/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2590

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$190/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3970

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$135.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2590.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla