Un mago platense entre los mejores

Elija cualquier carta del mazo completo que el mago Ariston tiene en la mano y el no sólo logrará adivinarla, sino que hará que el mismo naipe cobre vida, separándose del grupo con la sola mención de su nombre. Ariston repite el truco en la cocina de su casa de Los Hornos, como hace menos de un mes lo hizo frente a un jurado conformado por los mejores magos del mundo, y vuelve a despertar el mismo asombro. No es para menos: el truco, inventado por él mismo, fue considerado el segundo mejor del mundo en el último Congreso de Magos celebrado en Portugal y despertó el interés de prestidigitadores de distintos países, que se acercaron a conocer la mecánica.
Ariston -que en los documentos responde al nombre de Constantino Aleksi y es ingeniero y propietario de un comercio en la zona de Los Hornos- formó parte del nutrido contingente de representantes del Centro Mágico Platense que participó de la convención. El mago conoce bien los códigos del mundo de los ilusionistas y los repite entre sonrisas: "entre magos se aprenden y revelan los secretos, pero no se comparten con el público".

Lo que sí está dispuesto a revelar es el largo camino que lo llevó desde su barrio de Los Hornos al escenario de la convención en Portugal, donde, en el marco del mismo festival, David Copperfield fue designado Mago del Milenio.
Un evento que se extendió entre el 3 y el 8 de julio últimos y en el cual participaron más de 2.000 magos de todo el mundo.
El premio recibido por Ariston se suma a otras distinciones anteriores recibidas por el mismo mago, obtenidas en certámenes latinoamericanos y mundiales, enroladas todas en el área de la cartomagia y la invención de nuevos trucos.
Paradójicamente, la relación de Ariston con la magia comenzó de manera bastante indirecta, cuando su pasión por el ajedrez lo unió periódicamente a un grupo de amigos entre los cuales alguno conocía trucos de magia con cartas.

Con ellos comenzó a despuntar la nueva pasión en el tiempo de espera entre jugada y jugada de sus largas partidas de ajedrez. Y juntos se vincularon al Centro Mágico Platense, donde Ariston actualmente milita, hace alrededor de 20 años.
"Desde el principio me interesaron los juegos con cartas y siempre preferí esa rama de la magia", dice Ariston.
"En el Centro Mágico fui depurando mis conocimientos de cartomagia, gracias a los conocimientos de los magos con más experiencia y a la permanente consulta de bibliografía y videos de los magos más reconocidos del mundo", cuenta.
Admirador incondicional del mago español Juan Tamariz, Aleksi dice que sus momentos de crisis son lo que le depararon los mejores resultados en lo que tiene que ver con la magia.
"El proceso que derivó en la creación del truco premiado en Portugal comenzó en un momento en que estaba muy deprimido porque había perdido un trabajo en el que me había desempeñado durante 13 años. Por esos días había caído en un estado depresivo bastante pronunciado y me pasaba el día mirando videos de magia y practicando rutinas nuevas de cartomagia", refiere.
En eso estaba cuando el mago español Tamariz, que venía de actuar en Chile, pasó por Los Hornos a visitar a Alekis y aprovecharon para intercambiar información sobre cartomagia.
"En ese encuentro fue que Tamariz me alentó a seguir con la cartomagia y me dio algunas ideas que yo más tarde desarrollé hasta crear un truco original", dice Aleksi, "también tuvo que ver el hecho de que en el centro mágico se hacen reuniones periódicas en las que se plantean nuevos desafíos a desarrollar y en una de esas últimas reuniones yo había asumido uno de esos desafíos con la cartomagia".
Aleksi cuenta que una de las emociones más grandes que le deparó el reconocimiento obtenido en Lisboa fue la inmediata respuesta de afamados magos de todo el mundo.

"Después de mostrar el truco y de recibir el premio, fiel a los códigos que rigen entre los magos, ofrecí a quien quisiera la explicación de cómo se hacía y de inmediato un numeroso grupo de magos se acercó a consultarme. Pero lo más emocionante fue que entre ellos estaba Paul Daniels, que es el ilusionista que crea trucos para Copperfield.
Pero no fue la única emoción que le traería el festival: "la otra me la dio el mismo Juan Tamariz, cuando me mostró su último libro, en el que había incluido trucos de mi autoría".