Justin Bieber se descompuso y no terminó el recital

EL ÍDOLO EN ESCENA. POR MOMENTOS, LAS EXCLAMACIONES DE SUS SEGUIDORAS FUERON MÁS FUERTES QUE LA MÚSICA

El ídolo pop canadiense Justin Bieber debió suspender su recital en el Estadio de River Plate, donde se habían congregado unas 40.000 fans argentinas anoche, en la última de las dos presentaciones que ofrecía en el marco de su “Believe Tour”.

Bieber comenzó su presentación en el escenario River ante una multitud en el marco del Z Festival pero no la pudo terminar.

Es que el ídolo canadiense se tuvo que retirar del escenario y suspender su actuación debido a un problema de salud.

Según detalló el propio joven en su cuenta de Twitter, sufrió una intoxicación con la comida por lo que se encontraba con un malestar estomacal.

Aún así y con la finalidad de cumplir con sus fanáticas, apareció en el escenario para cumplir con su última fecha en Buenos Aires pero finalmente, a minutos de haber empezado, debió retirarse ya que continuaba con los dolores.

YA LO HABIA ANTICIPADO

Justin Bieber horas antes de llegar al Monumental había expresado que no se encontraba muy bien y explicó que alguna comida lo había intoxicado.

Luego, antes de retirarse del estadio, el canadiense explicó nuevamente al público que tenía un fuerte malestar y no podía continuar con el show.

Las fanáticas de inmediato en las redes sociales no sólo comprendieron sino que manifestaron su apoyo al ídolo adolescente, y no se informó si se pensaba reprogramar la actuación, cosa que anoche parecía poco probable.

En la noche del sábado, Justin dio un gran concierto al que asistieron 50 mil personas luego una exitosa presentación en el estadio Kempes en la ciudad de Córdoba que incluyó canciones de los tres álbumes en estudio que editó en su carrera.

En su segunda visita al país, el artista canadiense que aún no cumplió los 20 años, renovó el contrato de amor con los -sobre todo “las”- asistentes a su show en un espectáculo que tuvo su clímax en el estadio cordobés.

Ayer se repitió el fervor que comenzó en los alrededores del estadio. con escenas de llanto y devoción, remeras y vinchas alusivas y toda clase de merchandising ofrecido en forma oficial y también marginal.

La actividad comenzó durante la tarde, cuando se abrieron las puertas del estadio y con la llegada de la multitud hubo lugar para la actuación de los grupos Sonus, Owl City y los solistas Cody Simpson y Carly Rae Jepsen, en algo que era más una prueba de sonido que el disfrute de esas bandas.

En la segunda visita a la Argentina de Bieber, que motivó su mudanza por razones de griterío y obstrucción del tránsito desde un hotel de Puerto Madero a un lugar exclusivo en Nordelta, en la zona de Tigre, el show porteño del canadiense se benefició con que la tormenta anunciada no se produjo.

Algún rato después de la hora prometida, el espectáculo comenzó con artificios técnicos que fueron calentando la escena: tres pantallas gigantes emitieron imágenes del ídolo y momentos después un ajustado grupo de bailarines anunció lo tan esperado, todo con un despliegue sonoro atronador.

Finalmente ocurrió, las luces temblaron y River se estremeció como en los mejores clásicos. El chico, la celebridad, fue parte de la realidad.

Sin embargo a los pocos minutos de la presentación, el brusco malestar obligó a suspender el recital.