El Colegio Nacional tendrá una escuela técnica y adelantaría 4 meses el sorteo

Carlos Altavista
caltavista@eldia.com

Se avecina un cambio histórico en el Colegio Nacional de La Plata. Tras las vacaciones de invierno del año que viene, 30 alumnos de escuelas periféricas platenses inaugurarán el primer bachillerato técnico de la Universidad. Y si no surgen trabas al proyecto integral que hace casi dos años vienen elaborando en avenida 1, el sorteo de vacantes general para el ciclo académico 2019 se realizaría en julio, y entre agosto y noviembre los ingresantes -del secundario común y de la flamante escuela técnica- comenzarán a cursar a contraturno de sus establecimientos primarios. ¿El objetivo? Realizar una articulación “real” y “profunda” entre niveles.

El proyecto del bachillerato técnico fue creciendo entre 1 y 49 y 1 y 47. Es que se trata de una iniciativa con sede en el Nacional pero con dos padres: la institución preuniversitaria y la facultad de Ingeniería de la UNLP.

Otorgará el título de “bachiller técnico en saneamiento y gestión ambiental”. El ingreso no será por sorteo, sino mediante un trabajo de evaluación vocacional entre el Colegio Nacional y las escuelas de la periferia escogidas junto con Educación de la Provincia. Y apuntará a ofrecer una “educación de excelencia” y salida laboral “segura” a chicos y chicas se sectores socialmente vulnerables.

La financiación que requiere el proyecto es “mínima” y “ya está garantizada” desde la secretaría de políticas universitarias de la Nación.

Entonces, manos a la obra. “Durante el primer cuatrimestre del año que viene, integrantes de nuestro departamento de orientación educacional trabajarán junto con sus pares de las escuelas con las que estamos terminando de cerrar acuerdos (mediante el área de inspección de Educación de la Provincia), a fin de detectar alumnos interesados y con el perfil que una escuela técnica requiere”, contó a este diario la rectora del Nacional, Ana María García Munitis.

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Los “pares” del departamento de orientación educacional del colegio universitario son los profesionales de los denominados equipos de orientación escolar (EOE) que funcionan en las primarias provinciales.

Ya están en carpeta establecimientos de Tolosa, Villa Elvira, Ringuelet, apuntó la rectora.

no fue azar

Las zonas no fueron escogidas en forma aleatoria ni mucho menos. “Las escuelas se encuentran en sitios que fueron fuertemente afectados por la inundación” de abril del 2013.

En ese contexto, el decano de Ingeniería, Marcos Actis, subrayó que “la Región no cuenta con recursos humanos capacitados en temas relativos al tratamiento de aguas, sistemas cloacales, desagües. Algo que se complejizará con el avance de las obras hídricas”.

El proyecto “para la creación de una escuela de educación secundaria técnica en el ámbito de la UNLP”, tal su nombre completo, de algún modo recupera costumbres y estrategias de la propia institución y de otros colegios “hermanos”.

Por caso, los 30 chicos y chicas que inauguren “la técnica del Nacional” cursarán en horario vespertino: de 17 a 22. El establecimiento supo tener turno vespertino, aunque en su momento se trataba de una tercera banda horaria del bachillerato común.

El sistema de ingreso tiene puntos en común con el de la Escuela Agraria Inchausti. Si bien allí primero se realiza un sorteo, luego hay un periodo donde se evalúa, entre muchos otros aspectos, la “adaptación a las tareas rurales” de los aspirantes.

En este caso, esa evaluación vocacional se realizará previamente -como se dijo, durante el primer cuatrimestre de 2018- en conjunto con las escuelas primarias escogidas.

“En el supuesto de que queden vacantes sin cubrir de ese modo, se apelará al sorteo para completarlas”, aclaró García Munitis.

También trabaja de ese modo la Universidad de Buenos Aires con su escuela técnica ubicada en el barrio porteño de Villa Lugano, así como la Universidad Nacional de Quilmes y la de General Sarmiento con sus colegios.

Vale destacar que más allá de la autonomía pedagógica que tienen los colegios de la Universidad, la experiencia de la escuela técnica del Nacional se llevará a cabo en sintonía con el INET (Instituto Nacional de Educación Técnica), organismo que otorga validez nacional a los títulos de esa modalidad de la enseñanza.

En cuanto a la articulación “a contraturno” que se hará en el segundo cuatrimestre del año entrante, ésta guarda cierta similitud con el ciclo básico de formación estética del Bachillerato de Bellas Artes, que los niños y niñas realizan desde 5º grado.

articulacion para todos

Sin embargo, como se indicó, esa articulación no se circunscribirá a los alumnos de la escuela técnica, sino que abarcará a todos los ingresantes.

“Cada año el colegio recibe a 300 nuevos estudiantes. Ahora serán 330. Y lo que se propone, con vistas al ciclo lectivo 2019, es realizar el sorteo del ingreso en el mes de julio de 2018, antes de las vacaciones de invierno”, especificó la profesora en Ciencias de la Educación y rectora del CNLP. Así las cosas, todos los ingresantes “cursarían a contraturno entre los meses de agosto y noviembre, incluyendo a quienes se inscriban de la Escuela Anexa”, añadió.

¿Objetivo? Una articulación “real” y “profunda” entre el nivel primario y el secundario de la enseñanza. Una experiencia que también sería pionera en la Región.

La propuesta apunta a reforzar las cuatro áreas de trabajo de la escuela primaria: Lengua, Matemática, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales.

Ana García Munitis expresó al respecto que “es necesario ser consciente de que la escuela secundaria es un nuevo lugar, con otra cultura institucional”.

empezar “antes”

La secundaria “representa nuevos desafíos y competencias que se pueden apuntalar antes de que el alumno comience a cursar, construyendo estrategias que posibiliten la formación de los chicos y chicas como estudiantes y a ésta como un proceso”, enfatizó, para explicar que “trabajar con este objetivo supone tener en cuenta dos aspectos. Por un lado, la organización de los tiempos de estudio. Y por el otro, la construcción de estrategias de lectura y escritura para estudiar y dar cuenta de lo aprendido”.

“Ambos aspectos son procesos que sólo pueden ser construidos si, por un lado, existe acompañamiento y acciones planificadas en este sentido y, por el otro, un andamiaje fuerte que comience en la escolaridad primaria”, indicó.

Dos metas claves que se plantea el Colegio Nacional para el desarrollo del llamado “espacio introductorio” son: favorecer el acceso a la institución en todas sus dimensiones, para que los alumnos se desenvuelvan efectivamente de un modo progresivo, e implementar una propuesta pedagógica que, atendiendo a las especificidades de cada campo del conocimiento, inicie y promueva un proceso de enseñanza que favorezca las condiciones de aprendizaje de los alumnos.

El Nacional tiene una importante experiencia de articulación pero entre el nivel secundario y el superior. Ahora apunta a trasladar esa experiencia a la base de la pirámide.

“Ingeniería dicta aquí el curso de ingreso, mientras que entre las materias optativas de 6º año está Introducción al Derecho (asignatura de la carrera de Abogacía) y el año próximo profundizaremos la experiencia que venimos desarrollando con Ciencias Económicas”, describieron en la institución.

El emblemático colegio platense, creado antes de que se nacionalice la Universidad, tiene 1.800 alumnos, una matrícula sólo comparable con la del industrial Albert Thomas.

Cada año ingresan 300 adolescentes. Las vacantes surgen de restarle a ese número la cantidad de inscriptos provenientes de la Escuela Anexa.

Desde 2018 serán 330. Si todo marcha bien, con el tiempo se irán incorporando cursos a la Técnica.

Tres

Años de formación general más algunas materias técnicas tendrán los alumnos del nuevo bachillerato. Y desde cuarto comenzarán a cursar las asignaturas específicas con docentes del colegio y de Ingeniería, en dependencias de ambas unidades académicas

Cuatro

Meses durará el periodo de articulación entre la primaria y la secundaria (de agosto a noviembre). Lo realizarán, a contraturno, tanto los ingresantes de la escuela técnica como los del bachillerato tradicional. Adelantarían el sorteo a julio de 2018