“Yo pensaba que mi vida iba a pasar como entrenador de arqueros de Gimnasia”

Surgido de las divisiones juveniles de Gimnasia, Piñero fue muchos partidos al banco de suplentes durante años, pero solo pudo jugar 6 minutos oficiales en la Primera de su querido Lobo. Fue en la 1º fecha del año `85 cuando los albiazules regresaron a Primera División. A los 39 minutos del complemento ante Unión, expulsaron a Claudio Argüeso e ingresó el.

Hincha desde chico, vivió una tarde inolvidable el 30 de diciembre de 1984, cuando le tocó ir al banco en la revancha de la final ante Racing (en el partido de ida expulsaron a Castagneto y López fue titular en la revancha). Tenía 21 años.

Supo ser titular en amistosos y en la recordada “Copa Rucci” en un clásico en cancha de Estudiantes en 1986. El Flaco Argüeso, los uruguayos Fernández, Sosa, Siboldi que llegaron en aquellos años, también Moriconi, terminaron tapándolo por lo que debió emigrar.

Tras empezar como entrenador de arqueros en el Club al retirarse, su salida lo marcó. Lo echaron un 30 de diciembre sin explicación alguna. El DT era Carlos Ramacciotti, aunque no quiere nombrarlo.

- ¿En qué lugar quedó Gimnasia? Hoy seguro sos otro al que trabajó en el Club por última vez.

- Empecé mi trabajo por el noventa y pico en Gimnasia. Trabajé con Timoteo (Griguol) con Gregorio (Pérez)... (Hace una pausa, mira el piso con gesto de resignación y dolor) Yo pensaba en ese entonces que mi vida iba a pasar como entrenador de arqueros de Gimnasia, por distintas cosas de la vida a un técnico no le gustó mi cara y me hizo echar. Y lamentablemente para él, me fue mejor de lo que creía, porque me hizo echar porque no le gustó mi cara... Entonces aquello quedó muy lejos. En ese momento pensé que se me terminaba todo, pero solamente fue el inicio, fue abrirme la puerta para todo lo que me pasaría después y a donde llegué hoy. Gimnasia quedó como el Club donde me formé. Donde dejé amigos. Hoy me sigue llamando gente con la que jugué y tenemos una buena relación de amistad. Me quedó el cariño por el Club en el cual uno estuvo muchísimo tiempo.

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La satisfacción de trabajar con los chicos

- ¿Tenés rencores con el Club o con alguien?

- No tengo rencor con nadie. Me molestó la forma en la que me fui del Club. Después, nunca fui considerado, a pesar de haber llegado a trabajar en Selecciones, nunca nadie se acercó a preguntarme nada... Así que, estoy alejado de Gimnasia pero no porque yo quiera, esa es la verdad. Nunca nadie se me acercó para nada después de que me echaran. Pero no, no tengo rencor para nada con el Club, muy por el contrario, estoy agradecido por los años que pasé en la Institución donde puedo decir que me crié, y donde dejé muchos amigos. Hoy me toca estar en lugar donde no existe la camiseta, son los colores de nuestra bandera y me encanta. Ojalá siga así.

- ¿Te dan ganas de volver a trabajar en un Club o no?

- Los trabajos en clubes son distintos. Hoy estoy muy bien donde estoy, y no se si el día que no esté más en AFA me llaman de algún Club lo volvería a hacer con el mismo entusiasmo de siempre. Me caractericé a través del tiempo en trabajar en todo el Club. Es decir, en tratar de formar y subir arqueros. Me tocó en Racing por ejemplo con Chiquito Romero desde los 15 años. Cuando me fui de Gimnasia recién le habíamos dado entrada en Pre-Novena al Mono Monetti que lo había traído Marcelo Ramos, y llegamos a empezarlo a trabajar. En Racing también la recuperación de Musso que hoy está atajando en Primera. Seguimos apostando por algunos chicos con los cuales uno ha formado una relación como con Marchesín, Rulli, los que pasaron por la Mayor. Por eso, hoy no se si me dan ganas de volver a un Club, aunque obvio escucharía la propuesta, no la rechazaría.