Boca ganó un partido electrizante y quedó muy bien perfilado

Con goles de Lucas Blondel, Nazareno Colombo, en contra, Edinson Cavani y Nicolás Valentini, Boca le ganó 4-2 a Racing, que descontó por intermedio de Juan Fernando Quintero y Adrián Martínez, en un partido de alternativas cambiantes, electrizante por momentos, que dejó bien posicionado al conjunto Xeneize en lo que tiene que ver con su carrera por clasificar a los cuartos de final de la Copa de la Liga, por la Zona B, y por el contrario, muy complicado al conjunto de Avellaneda, sin margen de error en las últimas cuatro fechas.

Los Xeneizes se pusieron en ventaja cuando la Academia manejaba el juego y primer empate llegó cuando el local estaba cerca del segundo. Los goles revitalizaron el partido que en el segundo tiempo fue de locos, verdaderamente.

El clima de clásico fue en ascenso, y llegó al extremo cuando la gente de Boca recibió al equipo en forma espectacular, con un show de luces incluido, y papeles que inundaron el campo de juego, a tal punto que el ingreso del partido se demoró justamente para liberar sectores claves, porque el árbitro Pablo Echavarría trató de evitar cualquier tipo de confusión.

Y ni bien la pelota comenzó a rodar, desde las tribunas bajó el tradicional “que esta noche, cueste lo que cueste, esta noche, tenemos que ganar”, tratando de empujar al conjunto Xeneize que después de ilusionar con el triunfo ante Belgrano, construido con el “hat-trick” de Cavani, no cosechó nada en su visita a Unión, en Santa Fe.

La fiesta que resultó el ingreso de Boca para cruzarse contra Racing mostró también una bandera de grandes proporciones en homenaje a Diego Maradona, en una de las imágenes más fuertes de la previa de un partido en el que les costó, a los dos, llegar con posibilidades hasta el arco contrario.

Poco más de un cuarto de hora hubo que esperar un ataque de alto riesgo, elaborado por la Academia cuando Maximiliano Salas recuperó en la salida Xeneize y levantó un centro que Adrián Martínez bajó para la entrada de Bruno Zuculini, quien no encontró ni el tiempo ni el espacio que necesitaba en el mano a mano con Javier García, el arquero que reemplazó a “Chiquito” Romero y en este caso achicó bien.

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Boca no pudo adjudicarse el control de la pelota, y su primer ataque a fondo, con posibilidades, se le presentó gracias a un error de Gabriel Arias en la salida por abajo, poniendo en acción a Luca Langoni, cuyo pase al medio fue interrumpido por Santiago Sosa.

La pelota quedó en terreno de Racing, y un centro despejado por Sosa, de cabeza, le permitió a Blondel entrar en acción empalmando desde afuera del área para sellar en forma sorpresiva el 1-0 a favor del equipo de Diego Martínez. Sintió el golpe Racing, que volvió a perder las marcas y sobre la media hora, el arquero salvó el segundo sacando un violento zurdazo de Kevin Zenón.

Cuando Boca justificaba la ventaja, una corrida de Salas por la izquierda desemboco en un pase bajo al medio para la llegada del colombiano Quintero, que estableció la paridad, y esto terminó de encender el juego.

El segundo tiempo empezó a full: Leonel Miranda recuperó en el medio, buscó a Quintero, el colombiano que filtró para Martínez, que cruzó de zurda para el 2-1 de Racing, que no pudo sostener la ventaja porque un centro de Lautaro Blanco, a los 5 minutos, se desvió en Colombo, descolocando al arquero en su intento de cortar la trayectoria inicial del zurdazo.

Lo ocurrido no hizo más que animarlos a ir en busca del triunfo en el contexto de un partido abierto, con un pronóstico reservado, porque así como los Xeneizes tenían un mayor control de la pelota, la Academia contestaba con ataques profundos, mayormente organizados por Quintero.

El ida y vuelta terminó en gol, otro, a cargo de Cavani, que conectó de cabeza, al ángulo, anticipando a Sosa, un centro levantado por Blanco desde la izquierda tras recibir de Zenón, y en un final de locos, Valentini estampó el 4-2.