Italia investiga el gigantesco apagón
| 30 de Septiembre de 2003 | 00:00
ROMA, Italia.- Las autoridades italianas examinaban ayer sus sistemas eléctricos para investigar la causa del peor apagón desde la Segunda Guerra Mundial, y anunciaron medidas a fin de asegurarse que no vuelva a ocurrir.
Luego del gigantesco apagón registrado en Estados Unidos a mediados de agosto, las autoridades italianas dijeron, "esto no puede ocurrir aquí". Pero ocurrió y luego de un día de oscuridad, las autoridades trataban de adoptar medidas para asegurarse que el país, que depende en gran parte de energía importada, implemente fuertes medidas de protección.
La luz se fue en la mayor parte de Italia, excepto Cerdeña, poco antes de las 3.30 de la mañana del domingo (hora local). Y aunque en algunas regiones del norte la energía eléctrica retornó al amanecer, en Roma y zonas más al sur, la oscuridad se prolongó muchas horas. En algunas áreas, como Sicilia y Puglia, en el "taco" de la península, el apagón se prolongó 18 horas.
Unas 55 millones de personas se quedaron sin electricidad el domingo, comparado con unos 50 millones que se sumieron en la oscuridad el 14 de agosto en buena parte de Estados Unidos y de Canadá.
Carlo Andrea Bollino, director de la empresa de electricidad GRTN, que abastece a toda Italia, dijo el lunes a emisoras de radio que podrían ocurrir durante el día una serie de apagones programados y localizados, algunos de hasta 90 minutos de duración, a fin de probar diferentes puntos de la red eléctrica.
SORPRENDENTE DESCUBRIMIENTO
De pronto, Italia se quedó paralizada durante horas por un apagón general y descubrió que cuenta con una red eléctrica obsoleta y frágil y que el suministro depende en buena medida de otros países, como Francia y Suiza.
El descubrimiento sorprendió a buena parte de la opinión pública, sobre todo después de que el presidente de la empresa GRTN, que administra la red eléctrica, Andrea Bollino, declarara con motivo del apagón en Estados Unidos y Canadá del 14 de agosto pasado, que algo así "era imposible que ocurriera" en Italia. Fuera de la cadena de problemas que repercutieron en todo el país, cuyas causas aún no han sido establecidas, el apagón demostró que Italia es muy vulnerable y que es el país de la Unión Europea más dependiente de las importaciones de energía eléctrica.
Según cifras de GRTN, Italia importa el 15,8% de sus necesidades eléctricas, esencialmente de Francia y Suiza, así como de Austria, Eslovenia y Grecia. Tal porcentaje aumenta en las horas nocturnas hasta el 25%, cuando el consumo se reduce. Italia prefiere importar electricidad de países con centrales nucleares, ya que le cuesta menos que producirla directamente.
Luego del gigantesco apagón registrado en Estados Unidos a mediados de agosto, las autoridades italianas dijeron, "esto no puede ocurrir aquí". Pero ocurrió y luego de un día de oscuridad, las autoridades trataban de adoptar medidas para asegurarse que el país, que depende en gran parte de energía importada, implemente fuertes medidas de protección.
La luz se fue en la mayor parte de Italia, excepto Cerdeña, poco antes de las 3.30 de la mañana del domingo (hora local). Y aunque en algunas regiones del norte la energía eléctrica retornó al amanecer, en Roma y zonas más al sur, la oscuridad se prolongó muchas horas. En algunas áreas, como Sicilia y Puglia, en el "taco" de la península, el apagón se prolongó 18 horas.
Unas 55 millones de personas se quedaron sin electricidad el domingo, comparado con unos 50 millones que se sumieron en la oscuridad el 14 de agosto en buena parte de Estados Unidos y de Canadá.
Carlo Andrea Bollino, director de la empresa de electricidad GRTN, que abastece a toda Italia, dijo el lunes a emisoras de radio que podrían ocurrir durante el día una serie de apagones programados y localizados, algunos de hasta 90 minutos de duración, a fin de probar diferentes puntos de la red eléctrica.
SORPRENDENTE DESCUBRIMIENTO
De pronto, Italia se quedó paralizada durante horas por un apagón general y descubrió que cuenta con una red eléctrica obsoleta y frágil y que el suministro depende en buena medida de otros países, como Francia y Suiza.
El descubrimiento sorprendió a buena parte de la opinión pública, sobre todo después de que el presidente de la empresa GRTN, que administra la red eléctrica, Andrea Bollino, declarara con motivo del apagón en Estados Unidos y Canadá del 14 de agosto pasado, que algo así "era imposible que ocurriera" en Italia. Fuera de la cadena de problemas que repercutieron en todo el país, cuyas causas aún no han sido establecidas, el apagón demostró que Italia es muy vulnerable y que es el país de la Unión Europea más dependiente de las importaciones de energía eléctrica.
Según cifras de GRTN, Italia importa el 15,8% de sus necesidades eléctricas, esencialmente de Francia y Suiza, así como de Austria, Eslovenia y Grecia. Tal porcentaje aumenta en las horas nocturnas hasta el 25%, cuando el consumo se reduce. Italia prefiere importar electricidad de países con centrales nucleares, ya que le cuesta menos que producirla directamente.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE