El dólar estable y los mercados más serenos

El dólar terminó la semana estable, al cotizar a 3,29 pesos para la compra y 3,33 para la venta, en una jornada financiera más distendida.

En lo que va de noviembre, el billete norteamericano registra una baja del 2,3 por ciento, como consecuencia de las medidas adoptadas por el Banco Central para evitar bruscas oscilaciones.

Operadores señalaron que el mercado vuelve a operar con tranquilidad y sin mayor presión compradora, tras la batería de medidas impulsada por el Gobierno para controlar el valor del billete.

También tranquilizó a la plaza la medida tomada por el Central para inyectar más dinero al mercado al flexibilizar las exigencias mínimas de liquidez que deben tener las entidades financieras.

Asimismo, los cambistas consultados admitieron que hay más exportadores liquidando divisas, lo que incluso le permite al BCRA comprar dólares y recomponer reservas.

Una muestra del clima de mayor tranquilidad que se vive en la plaza es la baja registrada en las tasas de interés, como en el caso de las interbancarias que cayeron al 12,20 por ciento anual.

LA BOLSA

La Bolsa porteña, por su parte, subió ayer 0,68 por ciento para el lote de 22 empresas líderes y cerró la semana en baja de 6,73 por ciento, en una jornada plena de altibajos y moderado volumen de 66,9 millones de pesos negociados.

El sector líder abrió alcista de 1,88 por ciento, cayó 1,86 hacia media rueda y con sucesivos rebotes volvió a terreno positivo llevado de la mano de Tenaris que registró una sostenida suba de 4,20 por ciento.

Su buen balance contable presentado recientemente, más comentarios fundados en fuentes de la empresa acerca de un generoso reparto de dividendos convirtió a su plaza en el refugio de los inversores porteños que vendieron otros papeles para ingresar en la empresa de Paolo Rocca.

El mercado accionario porteño acompañó la tendencia de Wall Street donde se registraron constantes altibajos en una rueda que cerró una hora más tarde que en Buenos Aires con una violenta caída de 3,82 por ciento tras conocerse un declive récord en las ventas minoristas de los Estados Unidos de América.