Como amante, también era hombre de acción

A pesar de ser conocido en todo el país por sus modales policiales al límite de la legalidad, el ex comisario también tenía una enorme fama como conquistador y quienes lo conocieron afirman que "El Malevo Ferreyra era un amante muy respetado por sus mujeres".

En una columna redactada por el periodista Federico Van Mameren, del diario tucumano La Gaceta, se describe al famoso Malevo Ferreyra "un fantasma, un delincuente, tramposo, valiente, asesino, Malevo. Mario Ferreyra era todo eso. Al mismo tiempo".

"También era un líder y un amante respetado por sus mujeres. Cuando moría la década de los 80 era símbolo del policía duro. La tropa lo respetaba y lo seguía. Era capaz de levantarse en armas porque sí, porque el Malevo lo quería", sostuvo el profesional.

Aunque se afirma que en el pico de su popularidad "tuvo amoríos con gran cantidad de mujeres", su estadía en la cárcel afirmó su relación con quien fuera su última pareja, y de quien se despidió segundos antes de descerrajarse un disparo en la cabeza.

Todos recuerdan en Tucumán el momento en que abandonó la cárcel. Con el paso apresurado, Ferreyra subió a un Peugeot 505 azul para encontrarse con su mujer, María de los Angeles Núñez, y los dos hijos que tuvo con ella: Mario y Dendo Branco.