El Pincha lo aseguró rápido y toma fuerza su sueño Copero

Estudiantes dio otro paso en esta Copa Libertadores y ya está en las semifinales del certamen más importante del continente. El equipo argentino eliminó sin demasiados problemas a Defensor Sporting (verdugo de Boca), al ganarle por 1 a 0 ayer y 2 a 0 en el global. Ahora, para llegar a la tan ansiada final, deberá enfrentarse a otro conjunto uruguayo: Nacional de Montevideo. Este encuentro tiene historia, ya que los platenses salieron campeones ante ese rival, en la final de la copa de 1969.

Lejos de especular con la ventaja que se había traído de visitante, el local apostó a atacar y a tratar de jugar en campo contrario. Sin embargo, en los primeros minutos, ninguno asustaba a su rival, más allá de alguna pelota parada. La visita, por su parte, sabía que tenía que ganar sí o sí y por eso se animaba cuando tenía la redonda, aunque eran muy pocas las veces que eso ocurría y Andújar estaba tranquilo.

El encuentro era un poco más favorable al Pincha. Y lo sería más aún a los 13 minutos, cuando en la primera clara de la noche, apareció Leandro Benítez y con un derechazo abrió la cuenta. La jugada fue tras un centro de Enzo Pérez, que despejó muy mal Pintos y se la dejó servida al volante. Ahora sí que todo estaba más tranquilo, ya que los uruguayos estaban obligados a hacer dos goles.

SE HIZO DUEÑO

Con la ventaja conseguida, el equipo empezó a juntarse más, a tocar con pases cortos y así se hizo dueño del juego. Su rival no podía encontrarle la vuelta al trámite y en este tramo era ampliamente superado. Tanto así, que Boselli casi aumenta. El toqueteo era mucho para el otro conjunto y los jugadores importantes empezaban a aparecer en el armado del juego, como Verón (el más claro), Enzo Pérez (que se movía por las dos bandas) y el propio Benítez, autor del tanto.

Estudiantes era mucho más y cuando atacaba, causaba peligro. Boselli era el delantero que más asustaba y tras una gran jugada casi pone el segundo, pero sólo fallaba en la puntada final. A esta altura, un gol más no sería una locura para el resultado meritorio. Es que además de lo que causaba arriba, en el fondo también todo estaba muy controlado.

Igualmente iba a tener un susto grande en esa primera mitad, ya que Andújar salió mal y se chocó con Juan Manuel Díaz. Vera aprovechó y la empujó, pero apareció Cellay y la salvó en la línea, arreglando el error de sus compañeros. Un ratito más tarde, Salgueiro metió un tiro en el palo y sobre el final de la etapa inicial, el arquero del Pincha le tapó una linda volea a Vera. La ventaja era merecida.

En el complemento, Cellay, de buen partido, salió por precaución por un golpe en su rodilla derecha, que no sería nada grave. Para este momento, Defensor Sporting salió un poco más adelantado, ya que estaba obligado a marcar dos goles. Su oponente esperaba y buscaba liquidarlo con un contragolpe. Igualmente, los de azul, no tenían muchas ideas para complicar el arco adversario.

Con este panorama, pocas cosas pasaban en La Plata. Uno estaba muy cómodo con su ventaja y el otro no sabía cómo dar vuelta las cosas, así que el encuentro bajó varios cambios en relación a la primera mitad y se hizo de trámite mucho más parejo, sin buenas acciones en los arcos.

Muy aburrido era todo a esta altura. Los del Polilla Da Silva no causaban peligro y los de Sabella ya estaban pensando más en las semifinales que en otra cosa. Así pasaron los minutos y más allá que lo pudo liquidar, el Pincha no lo hizo, ni luego de la expulsión de Carlos Díaz. Ahora está esperando por Nacional, con el que chocará en las semifinales del torneo más importante de Sudamérica.