El kirchnerismo mete presión y le pide la renuncia a Cobos

Lo acusó de "cuasi golpista" y el radicalismo respondió que el Gobierno se "autodesestabiliza"

La fuerte señal de acercamiento de Julio Cobos a la UCR reavivó hoy la tensión con el Gobierno, que acusó al radicalismo y al vicepresidente de tener actitudes "cuasi golpistas" en la antesala de una etapa de batallas claves en el Congreso.

Sin embargo, la UCR en pleno advirtió que "es en realidad el Gobierno el que se desestabiliza", al tiempo que reivindicó la identidad radical de Cobos, a quien considera como uno de los suyos para el caso de votaciones empatadas en el Senado.

Casi al unísono, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; el ministro del Interior, Florencio Randazzo y los jefe de bloques de oficialistas de diputados y el Senado, Agustín Rossi y Miguel Pichetto, salieron a cuestionar al vicepresidente y a su partido.

La Presidenta Cristina Kirchner, por su parte, los acusó de no haber sabido gobernar y pidió que por lo menos "tiendan la mano".

Además, varios de ellos volvieron a pedirle la renuncia a Cobos, que ya adelantó su rechazo al DNU que crea el Fondo del Bicentenario al participar de una cumbre de legisladores radicales en la localidad bonaerense de San Nicolás.

Cobos "debe renunciar", porque "no puede ser vicepresidente de un gobierno y participar de las estrategias opositoras que se pergeñan para obstaculizarlo", lanzó el titular del bloque kirchnerista de la Cámara de Diputados, Agustín Rossi.

Por su parte, Randazzo señaló que "la UCR tiene una actitud cuasi golpista por pedirle al vicepresidente que vote en contra del gobierno del cual forma parte".

Y Fernández no se quedó atrás: denunció que "la UCR en con estas acciones se pone en una situación preocupante" y cuestionó que Sanz le "baje línea al vicepresidente, creando una situación compleja que pone en riesgo las instituciones".

Las críticas del arco oficialista encontraron a los legisladores de la UCR reunidos todavía en San Nicolás y así, en pleno, ratificaron que el radicalismo está "retomando el eje de trabajo coordinado con la oposición" y advirtieron que acusarlos de golpistas es "no comprenderlo que es el debate democrático".

"No hay cosa más desestabilizante que tener una actitud de confrontación, encierro y de soberbia permanente. Le pedimos al Gobierno que deje de desestabilizarse a sí mismo, que deje de agredirse a sí mismo para encontrar el rumbo y darle tranquilidad a la gente", señaló el presiente de la UCR, Ernesto Sanz.

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