Camba reaccionó a tiempo y logró un empate agónico

Estaba para el cachetazo, pero se reacomodó, pudo remontar una desventaja de dos goles y terminó festejando el punto

Cambaceres estaba para el cachetazo. Se había ido al descanso en desventaja, y hasta pudo ser goleado por Leandro Alem.

Sin embargo, en el complemento, en una reacción notable, llegó al descuento y sobre el final del partido, alcanzó la igualdad.

El empate, con sabor a hazaña para el Rojo de Ensenada, permitió el desahogo prolongado de los jugadores, que después del pitazo del árbitro, terminaron festejando la igualdad como si hubiese sido un triunfo.

Por cómo se había dado el partido, Cambaceres la sacó realmente barata. Si bien Leandro Alem pegó en los momentos menos oportuno, el equipo que dirige técnicamente Alejo Santa María sacó a relucir toda su capacidad y entrega, y sobre el cierre del encuentro, alcanzó una merecida igualdad que se cotiza en oro, si se tiene en cuenta que el Lechero es un rival directo en la lucha por la permanencia.

Los primeros minutos del partido fueron un fiasco. Pero dentro de ese contexto, el local se acomodó mejor a partir de la velocidad de Allende, un jugador desequilibrante y picante. Sin embargo, Camba consiguió acomodarse después de los 25 minutos, a partir del trabajo de los volantes.

De a poco, el Rojo fue marcando el camino en la cancha, pero le faltó contundencia y precisión en los metros finales. Un bombazo de Jones por arriba y un mano a mano de Pelosi daban cuenta de que Camba estaba mejor que Alem.

No obstante, y cuando nadie lo esperaba, Sebastián Allende abrió la cuenta a los 42.

En el complemento, Alem volvió a pegar de entrada (a los 8), a través de su figura, Allende. Y después, lo pudo haber liquidado. Pero la reacción de Camba no se hizo esperar. Se adelantó algunos metros, ajustó las marcas y por momentos, se llevó por delante a su rival. A los 20, Juan Cruz Calabrese encendió la luz de la esperanza con el tanto del descuento. Y sobre el final, Enzo Pelosi, quien recogió un rebote en el travesaño, estableció la paridad definitiva. Para Cambaceres fue hazaña.

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