Un Lobo inteligente, bien parado y con la decisión de batallar

Se nota ya la mano del técnico. Gimnasia da la sensación que no va a ser llevado por delante así porque sí. Se maneja con mucha actitud y, por pedido de Troglio, con mucho compromiso táctico. Esto le ha permitido tener poder de lucha pero, además, juego para ir en procura de lo que más está necesitando, que es ganar.

Salió con un planteo 4-2-3-1 que luego, en el arranque del complemento, tras el ingreso de Vizcarra por Benítez se transformó en un 4-4-2, y el dibujo después se fue modificando a medida que llegaron los otros cambios y lo que dentro de la cancha proponía el rival.

Lo que nunca dejó de lado Gimnasia fue el poder de lucha, mensaje que ha bajado del cuerpo técnico y que ya se ha hecho carne en los jugadores.

Cuando Marangoni relevó a Chaves, y especialmente cuando García ingresó por Vargas, el Lobo se acomodó con un 4-4-1-1 y, de contragolpe, bien pudo haber logrado algún gol más, pero también supo defender correctamente la ventaja y, por segunda vez consecutiva, mantuvo el cero en su arco.

Con dos semanas por delante para trabajar, seguramente el cuerpo técnico, a partir de mañana por la tarde cuando el plantel regrese a los entrenamientos, buscará potenciar lo conseguido hasta aquí desde lo táctico y estratégico, como agregarle otros aditamentos.

Cuando reciba en el Bosque a Boca Unidos, podrá contar con Sergio Vittor, que cumplió con la fecha de suspensión, y con Marcelo Goux, recuperado de una lesión.