Una carrera vertiginosa construída en la TV

El comienzo

En el mes de mayo hicieron su primera presentación en el programa de TV "Pasión de Sábado". Tocaron su hit "Tirate un paso" y a partir de ese momento estalló la fiebre. A caballo de su único éxito empezaron a recorrer eventos, discotecas y programas de TV. Había nacido una nueva moda.

"¿Yo no tengo nada Turro, no?

Susana Giménez quiso tenerlos en su programa y les dedicó 50 minutos de emisión, en los que cosechó 28 puntos de rating. Los chicos le contaron la historia de la banda, se enorgullecieron diciendo que hasta Justin Bieber había bailado su canción insignia y hasta bailaron con Miguel del Sel caracterizado como "La Tota". Cuando los adolescentes describían los detalles que definían el look turro Susana se miró a sí misma y preguntó: "¿yo no tengo nada turro, no?

"No me da la cabeza para esto"

Los integrantes de los Wachiturros pasaron también por el programa de Samuel "Chiche" Gelblung donde, sin previo aviso, lo invitaron a "tirarse un paso". Hicieron que Gelblung se ponga una gorra con la visera al revés al estilo "turro" y se esmeraron en explicarle algunos pasos. "No me da la cabeza para esto", fue la conclusión del conductor antes de regresar a su asiento.

Resonancias floggers

Cuando irrumpieron los fotologs alumbraron a una tribu urbana nueva, pero que resultó de corta vida: la de los floggers. Lucían sus peinados extravagantes y sus ropas coloridas, registraban todo lo que hacían con fotos en sus fotologs y valoraban en sus pares, sobre todo, la popularidad, medida en el número de visitas que sumaban en sus sitios de Internet. Amados por algunos, resistidos por otros, los floggers se reunían en el frente de algunos shoppings. Mucho de la estética flogger, mezclada con la de los cumbieros reaparece ahora en los turros, según destacan quienes se dedican a estudiar las tribus urbanas.