HIPERBREVES (Entrega #3)

1. Cada 300 pesos en frutas el supermercado me acredita letras, puntos y comas. Ya llevo acumulados 160 caracteres y espero poder armar un jugoso minicuento.

2.     Tanto lo persiguió la muerte, que lo alcanzó en un semáforo.

3.     Cazando mariposas, de un manotazo pescó el sol con el tejido de la red. Ahora, en un aviso clasificado, dice que tiene para la venta la mayor fábrica de sombras jamás vista.

4.     No fue difícil localizar el lujoso buque hundido. Aún tenía funcionando los ventiladores de techo produciendo remolinos en las profundidades.

5.     Con sus hijos no podía tomar medidas. Los chicos jugaban a las escondidas en los probadores y los clientes terminaban yéndose a otra sastrería.

6.     No era que la milonga que había compuesto fuese surrealista. Era el violín en las manos de ella que funcionaba a cuerda.

7.     Ella quería reproducirse a su imagen y semejanza. Como una diaria dosis de medicina, todas las mañanas se detenía diez minutos, desnuda y de pie, frente a su mejor espejo. Pero no pudo ser: el vidrio reflejó solamente su frialdad.

8.     Me parece muy buena la noticia que nos da el Gobierno acerca de que hay “un buen horizonte para la carne”. Ya empezamos a ver allá lejos al asado y a  la colita de cuadril.

9.     Tuvo una vaca de la que hablaba maravillas. Pero también tuvo una chiva que nunca quiso hablar.

10.                      Puedo hacer un asado sin luz. Y hacerlo sin parrilla. Y sin carne. Y sin ensalada. Y sin achuras. Y sin cubiertos. Y sin vino. Pero sin fuego, jamás.

11.                      Le narré una novela con sus crónicas, le escribí un cuento con sus historias y ahora quiere que sus rimas sean motivo para mi último ensayo. Lo único que falta es que me aumente la cuota de su taller literario.

12.                      Está en contravención etílica aquel que no alcanza el mínimo porcentaje reglamentario de sangre en alcohol.

13.                      Cuando el dermatólogo me descubrió unas escamas en la espalda debí confesarle que el sábado no tuve tiempo de limpiar la corvina antes de ponerla al horno.

14.                      Se inscribió en un curso de pronunciación con un afamado docente. Le duró poco. Comprobó que el profesor se comía las heces.

15.                      Es un arqueólogo que vive por debajo de la línea de pobreza. Hace años que busca entre los restos. Y cualquier huesito le viene bien.

16.                      Cuando le dije a mi abuela que para transitar en su dormitorio de parquet súper-encerado lo hago con los patines, ella me lo agradeció casi entre sollozos. Fue el momento en que aproveché a manguearle unos pesos para el cambio de rulemanes.

17.                      Para el que tira un planchazo con los tapones hacia adelante es más fácil ponerse en la piel del otro.

18.                      Ella le pidió que observara la suba de los precios del café y de las medialunas. El silencio se apoderó de la escena y él reconoció que debía desayunarse.

19.                      Los minicuentos que son eliminados en los concursos son los que tienen historias que no pasan.

20.                      Si alguna vez pasaste por el frente de un liceo y tuviste que hacer oídos sordos al estilo, modismos y expresiones que los y las adolescentes utilizan en sus diálogos, no te preocupes, en el interior de la casa de estudios es peor.

21.                      Tengo el galpón grande ocupado con cinco perros, Y en el galpón chico, que hay cuatro gatos, no hay nadie.

22.                      No tengo idea de cuántos libros ya llevo escritos. Si alguien se toma el trabajo de vigilarme cuando entro en las librerías, bolígrafo en mano, esperando que el vendedor me deje sólo, quizá pueda comenzar a llevar la estadística.

23.                      Para nosotros el símbolo de la injusticia es la balanza comercial.

24.                      Se entretenía pasando las páginas del calendario, de adelante hacia atrás y viceversa, hasta que en un determinado instante se dio cuenta que había llegado al final de su almanaque y pasó a estar aburrido, como cualquier muerto.

25.                      Decía, empecinadamente, que únicamente muerto se dejaría fotografiar sus grandes ojos claros, pero la imagen en su lápida lo muestra con los ojos cerrados.