Un demócrata bien liberal va a gobernar Nueva York

NUEVA YORK.- Los habitantes de Nueva York votaron ayer por primera vez en doce años el cambio de un alcalde, con el demócrata liberal Bill de Blasio, como seguro ganador de acuerdo a los primeros resultados a boca de urna conocidos al cierre de esta edición.

Su posición contra el que sería su antecesor, el multimillonario de Wall Street, Michael Bloomberg que gobernó la ciudad durante 12 años y no pudo volver a presentarse, le permitió captar un apoyo histórico que según las estimaciones previas podrían alcanzar hasta el 68 por ciento. Este demócrata que dirigió la campaña de Hillary Clinton al Senado se presentó ante el electorado como “el único con agallas para romper con los años de Bloomberg”, a quien atacó ”por ser un millonario elitista que gobernó para los ricos y defendió Wall Street a capa y espada”.

Citando a Charles Dickens, De Blasio sostiene que quiere acabar con esta “historia de dos ciudades” en la que mientras “400.000 millonarios dicen que Nueva York es su hogar, la mitad de nuestros vecinos se acerca a la línea de pobreza”.

Un discurso que alcanzó para hundir en las encuestas al candidato oficialista, el republicano Jos Lotha.

APOYO LATINO

De Blasio se dirigió en particular a la comunidad latina, que suma el 30% de los 9,2 millones de habitantes de la Gran Manzana.

“Necesito la ayuda de todos ustedes”, dijo en perfecto castellano De Blasio durante un acto realizado en las puertas de la Alcaldía de Nueva York, donde los principales líderes hispanos de esta cosmopolita ciudad le expresaron su apoyo.

LIBERAL

Desde muy joven, De Blasio se mostró partidario de las políticas sociales y de contenido liberal de acuerdo a la concepción americana del término que la asemeja a la izquierda en otros países.

En 1988, por ejemplo, viajó a Nicaragua para apoyar a los sandinistas y un año después militó en la campaña demócrata de David Dinkins, el primer alcalde negro de la ciudad. Casado con la poeta lesbiana Chirlane McCray, con la que tuvo dos hijos, De Blasio considera a Cuba antidemocrática pero a la vez alaba sus políticas sociales, en particular su sistema de salud.

El líder demócrata prometió subir los impuestos a los que ganen más de 500.000 dólares por año, financiar centros infantiles gratuitos, salvar los hospitales públicos y darles una identificación a los inmigrantes indocumentados. Estas propuestas han puesto los pelos de punta a Bloomberg, un hombre que hizo buena parte de su fortuna de 31.000 millones de dólares con una agencia de noticias financieras dirigida a los especuladores de Wall Street.

Bloomberg califica a De Blasio de populista que promueve la lucha de clases y el racismo. Con su creciente popularidad, el candidato reemplazará a uno de los alcaldes más emblemáticos de Nueva York, quien por ley sólo puede ocupar el puesto en tres períodos.

El político de 52 años y casi dos metros de estatura, con una familia que se destaca además de por los antecedentes de su esposa, por el inusual look afro del hijo, despierta también gran rechazo entre el sector más conservador de la ciudad.

Al cierre de esta edición, el gobernador republicano moderado Chris Christie fue reelegido en Nueva Jersey y en Virginia, se descontaba un triunfo del demócrata Terry McAuliffe en Virginia con un golpe duro al Tea Party republicano.