Fuerte respaldo de científicos de la Universidad

Desde la facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la UNLP se puso en relieve ayer que “el apoyo del Instituto Nacional de Vitivinicultura a la lucha que vienen dando los productores de Berisso desde que decidieron reimplantar el cultivo de vid, hace quince años, es una reivindicación histórica”.

La ingeniera Irene Velarde, integrante de la unidad académica y participante activa de ese proceso de reactivación desde 2003, sentencia que “el vino de la costa no es masivo, es un producto diferenciado y no puede afectar en nada los intereses de las provincias de Cuyo. Nosotros estamos apuntalando el resurgimiento de un vino que es histórico, no se trata de una nueva vitivinicultura; comienza en el inicio del siglo XX, así que hay un derecho adquirido por los productores y eso no debe discutirse”.

“Una de las observaciones que realizan los grandes bodegueros se refiere a la calidad del vino, y desde mi punto de vista como científica, el concepto de qué es calidad es relativo” agrega Velarde: “yo podría decir que la calidad es lo que le gusta al consumidor, y acá hay un consumidor del vino de la costa, muy arraigado al gusto en cuanto a la cercanía del río, con la uva mal llamada ‘chinche’ que tiene un aroma y sabor muy característico que agrada al consumidor regional; es un gusto que se construyó a través de la historia. Decir que hay una calidad ‘objetiva’ está encuadrado en una escuela de pensamiento donde los argumentos son muy reduccionistas”.