Ofrecen recompensas de 500 mil pesos por datos para recapturar a los presos: son todos peligrosos
Edición Impresa | 21 de Agosto de 2013 | 00:00
De esta manera el ministro se refirió a la fuga que se produjo ayer y luego de la cual el director del SPF presentó “su renuncia indeclinable”.
Tras ser aceptada, el ministro anunció la designación de Alejandro Marambio como nuevo director del Servicio Penitenciario Federal, en reemplazo de Víctor Hortel, y detalló que el nuevo funcionario es abogado y experto consultor en materia carcelaria en Argentina y España, país del que llegará en las próximas horas para asumir en el cargo.
Paralelamente, se anunció una recompensa de 500.000 pesos para aquellos que aporten datos respecto a los 11 reclusos que aún permanecen prófugos -dos de los 13 que escaparon fueron recapturados por la policía- luego de la fuga que protagonizaron del penal de Ezeiza.
FUGA Y HERIDOS
Con respecto al incidente que se generó entre algunos internos y penitenciarios, oficialmente se explicó que los heridos que se produjeron horas más tarde de la fuga en la misma unidad carcelaria “no configuran el tipo penal de toma de rehenes ni de motín, porque se trató de un interno con principios de asfixia por incendiar un colchón y un empleado penitenciario que fue atacado cuando buscó limitar la circulación interna en el patio interior”.
“Obviamente -señaló el ministro Alak- hay una reacción de los guardiacárceles de cerrar las celdas, extremar algunas medidas de seguridad que generan en algunas personas detenidas algún nivel de reacción más violenta que el habitual, y por ejemplo quieren salir al patio”.
Asimismo, respecto de la fuga, describió que “el Ministerio tiene información que se la está suministrando al juzgado interviniente” y, sobre los fugados, dijo que no podía dar mucha información para no entorpecer la investigación judicial, pero destacó que de los 13 reclusos, dos de los cuales ya fueron capturados, cuatro fueron organizadores del escape.
Según se informó, dos de los ideólogos de la fuga ya tenían antecedentes de escapes en Paraguay y Brasil, mientras que los otros dos habían hecho lo propio en Argentina.
En cuanto a los guardiacárceles separados de sus cargos a raíz del episodio, el ministro sostuvo que “será la Justicia la que determine su responsabilidad o no en el plan de fuga”.
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