Aceites para el cabello

Es la cura ideal para el pelo pero muchas mujeres todavía no se sienten seguras a la hora de su aplicación. Aquí, tres formas de utilizarlo.

- Lo más común (y menos complicada) es aplicárselo con el pelo limpio y mojado, justo después de la ducha. Bastará con una cantidad pequeña, del tamaño de una nuez en la palma de la mano, para disfrutar de todas sus propiedades. Asegurate de no aplicártelo en ningún momento en la raíz, y de insistir en las puntas.

- Utilizarlo como tratamiento previo al champú también es buena idea (sobre todo si sentís que si lo aplicás antes del secado deja el pelo demasiado graso). Lo ideal es que te lo apliques por la noche, lo dejes actuar y te laves el pelo el día siguiente. Si utilizás un aceite natural, aplícatelo también en el cuero cabelludo. Pero si la idea de dormir con la cabeza cubierta de aceite te parece un mundo, optá por aplicarlo una hora antes del lavado.

- La última opción es utilizarlo sobre el pelo seco, como producto de acabado. Es perfecto para pelo muy seco y rebelde, y para mejorar visiblemente el aspecto de las puntas. Evitá, de nuevo, medios y raíz.

Si después de seguir estos consejos todavía no te sentís cómoda con el resultado, tal vez el problema esté en el aceite. Si tenés el pelo grueso o encrespado todos los aceites del mercado son adecuados, pero si lo tenés fino y liso tenés que elegir uno formulado especialmente para ese tipo de pelo.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE