Boca se metió en octavos con muy buen fútbol y tres golazos

Con dos golazos de Andrés Chávez, uno en cada tiempo, y del chileno José Fuenzalida, Boca derrotó 3-0 anoche de local a Rosario Central y se clasificó para los octavos de final de la Copa Sudamericana. En el partido de ida jugado en Rosario, habían empatado 1 a 1. Ahora Boca espera por su rival en octavos de final, el que saldrá del cruce entre Deportivo Capiatá, de Paraguay, y Caracas, de Venezuela, que empataron 1-1 en el partido de ida.

Boca marcó claras diferencias a su favor en el primer tiempo. Se mostró coherente, solidario y muy determinante también a la hora de atacar.

Central se vio entonces desbordado por la actitud que demostraba el local que, tras realizar los méritos necesarios pudo llegar al gol.

Y fue un golazo, dicho sea de paso. Desde la concepción de la jugada como la forma en que la resolvió, a los 20’, Andrés Chávez.

El delantero xeneize capturó una pelota en la puerta del área (se la acomodó Calleri con el pecho) y sacó un tremendo zurdazo que se metió arriba, contra el palo izquierdo, e hizo estéril la estirada de Caranta para poner el 1-0 a para el xeneize y decretar la explosión en la Bombonera.

Encima cuando el canalla intentaba reaccionar del golpe recibido, el juez le mostró la segunda amarilla a Lucas Acevedo y lo mandó a las duchas a los 37 de la primera etapa, por el que el partido se le hizo más cuesta arriba aún a los dirigidos por Miguel Russo. El gran problema de Central estuvo en el medio, donde los volantes no lograban contener y tampoco generaban juego, mientras que los delanteros quedaban muy aislados. En contrapartida, lo de Boca era muy solvente, y además ganaba en el medio y los volantes despegaban rápido hacia el arco de Caranta, especialmente por el lado de Melli y Carrizo. En el complemento el partido se aquietó un tanto. Boca siguió igualmente siendo superior aunque no hizo pesar decididamente la ventaja numérica que disponía, mientras que Central buscó darle profundidad a sus movimientos ofensivos y llegó un par de veces pero sin claridad. Y cuando el tedio estaba ganando a todos, desde la derecha, Gago cruzó un pelotazo al área y Chávez, entrando por la izquierda y lanzándose en palomita cruzó el balón hacia el palo izquierdo de Caranta, anotando el segundo tanto. Enseguida vino la corrida de Fuenzalida, habilitado por Gago, y con tiro bajo clavó el 3-0 final.