Patrick, el comandante del avión que intentó evitar la catástrofe

Patrick Sonderheimer, es otra de las piezas claves en el accidente del Airbus A320 de Germanwings.

Se trata del comandante que quedó afuera de la cabina y ya no pudo regresar puesto que el copiloto Andreas Lubitz bloqueó la puerta y, según el fiscal del caso Brice Robin, estrelló el avión contra la montaña.

Según se desprende de las grabaciones, el comandante pudo haber cambiado el curso de la historia. Buscó tirar la puerta de la cabina abajo a fuerza de golpes, a patadas, con un hacha. Gritó desesperadamente cuando las alarmas se dispararon, advirtiendo que la tierra estaba cerca.

El comandante, al que todos conocían como Patrick S., hizo todo lo posible por retomar el control de su avión y evitar la tragedia. Pero no pudo.

La grabación de la caja negra, según el fiscal, fue esencial para saber que el comandante reclamó que el copiloto Andreas Lubitz le abriera la puerta de la cabina e intentó derribarla por la fuerza ante la falta de respuesta. Pero ya era tarde.

UN ERROR FATAL

El “error fatal” del capitán Sonderheimer, un piloto experimentado con más de 10 años de carrera en Lufthansa, Germanwings y Condor, con más de 6000 horas de vuelo a bordo del Airbus320, fue haber abandonado la cabina para ir al baño. Cuando regresó encontró la puerta trabada. “Jamás hubo una respuesta”.

Padre de dos niños, sus compañeros lo recuerdan como “uno de los mejores”, siempre de “buen humor”. Y están convencido, sin excepción, que Patrick S. hizo todo lo posible para salvar a los pasajeros.