Beba mutilada: investigan presunta trama de abusos y encubrimiento

Luego de que varios vecinos quemaran su casa en Berisso, la menor se instaló en Brandsen con el padre y las hermanas

Luego de las horas de creciente tensión que se vivieron en un sector del barrio Villa Progreso de Berisso, por la aparición en un descampado del cuerpo mutilado de una bebita, la causa judicial comenzó a desandar un camino plagado de dudas e interrogantes.

Como se sabe, la madre de la criatura es menor y, en principio, no podría ser objeto de ningún proceso penal en su contra.

Si bien existía una duda respecto a su edad (15 ó 16), que comprendía situaciones judiciales diametralmente opuestas en el expediente, el planteo de imputabilidad que presentó la defensoría oficial, despejó ese contrapunto.

De acuerdo a fuentes de tribunales, la chica tiene 15 años y, por ende, sólo sería pasible de una medida de seguridad (internación) que, como adelantó este diario en su edición anterior, podría requerirle el fiscal penal de Responsabilidad Juvenil, Juan Benavides, quien se hizo cargo del caso tras la declinatoria de competencia presentada por la titular de la UFI del Crimen, Leila Aguilar.

De todas formas, antes de formular un eventual planteo en esos términos, Benavides aguardá el resultado de una serie de informes que realizaría un equipo de especialistas.

Esos estudios, se indicó, se harían hoy en la ciudad de Brandsen, donde se instaló la joven luego de que estallara la violencia y estuviera en riesgo su seguridad y la de su familia.

Precisamente, siempre a decir de los mismos voceros, la chica quedó alojada en una finca junto a su padre y las cuatro hermanas. Y lo que se intentaría determinar en un primer momento es “si cuenta con el apoyo y atención necesaria”, aclararon.

En ese punto, existe también una grave sospecha, que apuntaría a una presunta trama de abusos y encubrimiento, la cual, en un futuro no muy lejano, podría tener serias implicancias para personas de su entorno más cercano.

Aún falta acreditarse, con un ADN, que la joven sea -como se cree- la madre de la bebé, cuyo cuerpo mutilado apareció en un predio de las calles 125 y 81.

Pero respecto al padre de la criatura, por ahora, sólo hay versiones y todas apuntarían a un pasado muy oscuro.

La chica fue asistida en el Policlínico San Martín, donde estuvo internada poco más de un día. Todavía no habría prestado declaración ante los investigadores y, en la presente jornada, a partir de la intervención del cuerpo técnico, podría empezar a correrse el velo, que esconde el horror tan temido por todos.

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