Abierto hasta el amanecer

Pasar por alto los cerramientos del hogar encarece su coste habitual. Si las puertas y ventanas no cierran bien el calor se irá en invierno y el frío en verano, con lo que la factura se incrementará sin que apenas notemos los cambios de temperatura.

Los especialistas considera que hay que tener en cuenta tres puntos fundamentales a la hora de elegir, por un lado el material y diseño; el vidrio; y la persiana, con el fin de que cada uno de ellos se adapte a nuestra necesidades.

“No hay que olvidar que las ventanas deben indicar los valores de aislamiento, permeabilidad y resistencia, de acuerdo a ensayos en laboratorios oficiales”, indican los expertos de la firma, algo fundamental para no llevarse después sobresaltos.

MATERIAL Y DISEÑO

Según los especialistas, el PVC es el mejor material de aislamiento ya que no es conductor. En cuanto a la capacidad aislante, depende del número de cámaras de aire del perfil y de su estructura.

El aluminio con RPT (Ruptura del Puente Térmico) se consigue con una pieza aislante que reduce la conductividad térmica propia del aluminio. La capacidad aislante depende del espesor y el material de esta pieza, preferiblemente una de poliamida de 24 mm.

Entre los materiales más aislantes, la madera tiene una capacidad de aislamiento mayor que la del aluminio, aunque para sacar el mayor provecho a su poder aislante hay que tener en cuenta la calidad de las juntas y, sobre todo, prestar una importante atención a su mantenimiento, fundamental para mantener intactas sus propiedades.

Los expertos recomiendan vidrios con control solar, y siempre es conveniente el doble acristalamiento con cámara de aire

Algunas firmas consideran que las ventanas son un elemento esencial en los hogares, no solo por su capacidad aislante, sino como elementos decorativos que personalizan una vivienda.

Una razón por la que la disponibilidad de colores y una amplia gama de acabados son sus alternativas para cualquier tipo de vivienda, además de la diversidad de acabados.

VIDRIO

La elección de su composición y propiedades depende de las necesidades particulares de cada vivienda. Los especialista recomiendan vidrios con control solar. Y siempre es conveniente el doble acristalamiento con cámara de aire.

Hay que recordar que el básico permite el paso total de la luz. Si da mucho el sol, se necesita persiana o toldo.

El vidrio bajo emisivo aísla hasta tres veces más que el básico. Es ideal para climas extremos en verano e invierno, ya que evita la pérdida de temperatura interior de la vivienda.

Una de sus variantes, el bajo emisivo con control solar, reduce la entrada de rayos UV, lo que lo hace perfecto para climas cálidos y habitaciones soleadas, pues evita la entrada de calor del exterior por exposición directa al sol.

Una buena persiana mejorará el aislamiento de la ventana. Una mala elección puede descompensar las propiedades del perfil y del vidrio, aseguran los profesionales. Es recomendable que el cajón de la persiana incorpore material aislante.

RECOMENDACIONEs

En un ático con orientación sur, recomiendan cerramientos de aluminio con rotura de puente térmico y doble cristal bajo emisivo.

Si la casa tiene dos plantas con orientación sur y el gas natural la hace muy calurosa, lo mejor es optar por cerramientos de PVC. Elige cristales bajo emisivos con control solar y no te olvides de las persianas motorizadas y los herrajes de seguridad.

En un piso con calefacción individual de gas propano, buscar una solución fácil y duradera para aislarla del ruido, frío y calor llega de la mano de cerramientos de PVC con cristal acústico y bajo emisivo.

Para ganar luminosidad en un salón orientado al norte, lo mejor es sustituir la ventana y la puerta por un cerramiento de PVC blanco.