¿Y lo quieren vender nomás?

¿El fin de semana tras la victoria en Paraná fue el ojo del huracán? Así parece. La semana pasada fue tormentosa y tortuosa, entre los mil y un trascendidos de la venta de Meza a Independiente (que la dirigencia de Gimnasia quería hacer) y el posterior choque entre Onofri y Alfaro, "absurdo e innecesario" según los dichos del entrenador. Con la transferencia caída, un cruce de whatsapps propiciado por Alfaro y el posterior abrazo entre Presidente y entrenador parecía sellar la paz. Parecía...

     Esta noche de miércoles, Daniel Onofri tuvo en las manos una nueva oferta de Independiente, que evidentemente se manejó sigilosamente. Se habla de U$S 2.100.000 por el 70% del pase, haciendo participar a Sergio Carrizo (quien posee un 35% de la ficha del correntino) de la negociación. El marco de hermetismo de las charlas impiden un conocimiento cabal de la composición de ese 70% del que se habla. Lo cierto es que Gimnasia vendería al jugador en una cifra cercana a la cláusula de salida, sitiuación que no sucedió la semana pasada por la negativa del co-propietario y representante del jugador. Hoy, Daniel Onofri y el tesorero Manuel Mansanta impulsan la operación. Una negociación que dirán que es por el valor de la cláusula, pero que de ninguna manera tendrán 3 palos verdes contantes y sonantes encima de la mesa. La mesa por Meza implica tira y afloje. Al jugador lo negocian. Onofri quiere terminar el mandato a su manera, sin ayuda externa. 

     Cuesta entender el interés de la dirigencia de Gimnasia en concretar esta venta, máxime teniendo en consideración el aporte externo de un grupo de socios que se comprometió a equilibrar los números del déficit mensual de aquí a fin de año. Y que sea el Independiente de Moyano el que seduce una y otra vez; la oferta de Lens de Francia dio lugar a menos negociaciones. Si Gimnasia le vende a Meza a Independiente ("Por el bien del club esperemos que se dé", se sinceró un dirigente) ¿cuál será la reacción de Gustavo Alfaro? Después de todo lo sucedido la semana pasada parece una mojada de oreja, una invitación a la salida o cuanto menos un "acá mando yo". Cómo sea, no parece el mejor corolario para una situación de crisis originada en la posible venta de Meza que incluyó una frase excesiva ("le dije a Onofri que si lo vendía no va a poder caminar por La Plata") y una respuesta virulenta de la CD en un comunicado (repudiando "las desaprensivas expresiones" que -entienden- pusieron "en riesgo la seguridad de dirigentes y sus familiares").  Leído así, quien no conoce la historia piensa en gente de clubes rivales. Es Gimnasia. Si venden a meza, tal vez ni siquiera la frialdad alcance para sostener la convivencia, con cheques que volvieron rebotados y un sondeo de Peñarol de Montevideo ahí, al alcance de la mano.

     Daniel Onofri, Héctor Maldonado (secretario de Independiente), Sergio Carrizo. Los nombres que deciden si Meza sigue Lobo o se hace Diablo. ¿Gimnasia? A Gimnasia no le dan paz.