Un feroz ataque vandálico volvió a destruir la calesita de Tolosa

El asombro y la bronca ganaron terreno ayer en la plaza Martín Iraola de Tolosa, donde a pocas horas de que los vecinos repararan la calesita, el juego fue otra vez destruido por vándalos. La despedazaron y, al parecer, rompieron definitivamente el motor que le permite funcionar al intentar hacer una maniobra en reversa, según explicaron vecinos que dialogaron con este diario.

La Pituquita fue noticia otra vez por los destrozos que sufrió. El segudo ataque en una semana, ya que el lunes 16 de enero había sido noticia por el feroz ataque que había sufrido. En esa oportunidad, los vándalos habían sido divisados en las imágenes que registra la cámara de seguridad de monitoreo público. Pero el ataque de este fin de semana la situación fue diferente, ya que según la Municipalidad, “se revisaron las imágenes y no se detectó a nadie en la zona”.

Ayer a la tarde, Adelia Britos, dueña de la calesita de Tolosa, expresó su bronca por lo ocurrido. “Nos deja sin poder trabajar durante un tiempo que realmente desconocemos”, dijo.

“EL PROBLEMA SE AGRAVO”

También otro vecino planteó que “el problema se agravó, y no sabemos qué hacer, porque no entendemos quién se puede ensañar con semejante ataque a un juego para niños. Quién no jugó en la calesita”, planteaba ayer Pablo, uno de los vecinos que estuvo el sábado trabajando en la reparación de la calesita.

En tanto, otro vecino que estuvo en el lugar, remarcó que “el esfuerzo que se hizo el fin de semana no valió de nada. Es un símbolo de Tolosa y queríamos preservarlo para las nuevas generaciones, pero con este ataque no sabemos si se podrá hacer algo”.

El fin de semana estuvo presente en el lugar el edil Julio Irurueta, quien tiene un proyecto para declarar a las calesitas de la Ciudad como patrimonio histórico. También plantea la posibilidad de que se realicen convenios con la Escuela Técnica Nº 6, para que los alumnos puedan reparar las instalaciones eléctricas que tienen estos juegos.

Precisamente, el juego de la plaza Iraola está en terapia intensiva, según lo que habían encontrado los vecinos el sábado pasado. Y con los daños que hicieron este fin de semana, a pocas horas de los trabajos comunitarios de los vecinos, la situación empeoró.

“A las 6 de la mañana nos encontramos con la calesita destrozada bajo las cámaras de seguridad. Ahora fueron mayores según los vecinos que llamaron al 911 y no vino nadie. Estamos enojados porque Tolosa es tierra de nadie, no hay atención policial como la gente, los presos se escapan y rompieron de nuevo la calesita que es un símbolo. Estamos muy enojados”, dijo uno de los vecinos que estuvo ayer en la plaza para intentar reparar el juego tras el nuevo ataque.

Adelia y su familia hace más de 20 años que tienen la calesita como un proyecto que surgió por el amor que sienten hacia los chicos. El emprendimiento les hizo vivir momentos muy gratos como por ejemplo durante aquellos días en los que entre vueltas y sortijas se festejaba el Día del Niño.

“Antes la teníamos en 25 y 60, pero decidimos mudarla a esta plaza porque somos de Tolosa y queríamos trabajar cerca”, explicó en su momento Britos.

En toda La Plata sólo quedan 10 calesiteros y aseguran que tienen los mismos problemas. Pero contra viento y marea voy a seguir adelante. Mis hijos quieren que la venda, mi hermana también quiere que la venda porque dice que ya no estoy en edad de estar trabajando para atenderla, pero yo, mientras me de la fuerza, voy a seguir, porque siento pasión por las calesitas. Cuando yo veo una calesita, sea donde sea, paseando o viajando, pago la ficha y me subo”, asegura Britos cuando le consultan por el futuro de estos juegos infantiles.

Aun quedan calesitas en el parque Saavedra, en plaza Sarmiento, plaza Paso, en parque Alberti, en el parque San Martín, entre otros lugares.

Como se dijo, hay un proyecto para que se declaren patrimonio histórico, y de esa manera dejen de pagar un canon mensual que va de 1.800 a 3.500 pesos, para que puedan invertirlos en el mantenimiento y la mejora de los juegos.