“Me veo gorda”, el drama de las quinceañeras frente al espejo

Casi la mitad de las quinceañeras creen estar demasiado gordas o tener sobrepeso, aunque sólo la mitad de ellas cumple con los criterios de sobrepeso u obesidad. El dato surge de un estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud en 22 países, e ilustra un problema que también se detecta en los consultorios platenses, donde los especialistas manifiestan su preocupación porque un número creciente de adolescentes tiene una imagen corporal negativa de sí mismas, lo que supone el riesgo de que padezcan trastornos alimentarios.

Entre las chicas de 13 años consultadas, el 15% reconoce que hacen dieta y ese porcentaje sube al 23% cuando se considera a las de 15.

El fenómeno, que había disminuido en los últimos años con la aparición de varias iniciativas que buscaban contrarrestar la imagen de las modelos ultra flacas, recrudeció en el último año, según se indica en La Plata, donde algunos profesionales hablan de un 20% más de consultas por sobrepeso u obesidad de chicas que no padecen ninguno de los dos problemas.

Para los especialistas, esta autopercepción negativa por parte de las adolescentes viene acompañada de un riesgo importante: el de convertirse en la puerta de entrada a trastornos alimentarios, entre ellos, la bulimia y la anorexia.

Las chicas, dicen los expertos, viven en un mundo que difunde cuerpos perfectos a través de los medios, el cine, la televisión, las redes sociales o las pasarelas. Pero esas modelos ultraflacas representan entre el 1 y el 3% de la realidad. Es por eso que en los últimos años hubo varias campañas que buscaban popularizar a la “mujer real”. Pero a pesar de un fuerte impacto inicial, esas campañas fueron perdiendo fuerza y el mundo de las pasarelas sigue reivindicando la delgadez extrema.

El trabajo realizado por la OMS pone en evidencia que el problema afecta sobre todo a las chicas: entre los varones, sólo el 22% tiene una percepción de sí mismo con sobrepeso y es el porcentaje que realmente lo tiene.

La distorsión de la propia imagen que sufren las chicas, además, se acentúa a medida que cumplen años, según surge del informe. Mientras el 26% de las chicas de 11 años dijeron verse gordas, ese porcentaje sube al 43% a los 15.

Entre las chicas de 13 años consultadas, el 15% reconocieron que hacían dieta y ese porcentaje sube al 23% cuando se considera a las de 15.

Otro dato preocupante que surge del informe es que el 20% de los adolescentes (en este caso, tanto chicos como chicas) confesaron que tenían dificultades para hablar con sus padres de los problemas que enfrentan en su vida de todos los días.

A estos datos, el estudio suma otros tales como que las chicas comen más frutas y verduras que los varones (el 37% de ellas dijeron que lo hacían a diario, mientras que sus compañeros hablaron del 29%).

Otro dato que revela el informe es que las chicas presentan más problemas de salud en la adolescencia que los varones: el 50% tiene una queja relacionada a la salud más de una vez a la semana contra el 27% de los chicos.