La Selección entrenó en silencio

Con Lionel Messi, aún con poco  descanso, y el enigma latente en torno al delantero Paulo Dybala,  el seleccionado argentino de fútbol realizó el primer turno de  entrenamiento del día de cara al crucial partido ante Chile, el  jueves en el Monumental, por las Eliminatorias del Mundial de Rusia.      

Messi llegó al predio de AFA en Ezeiza casi a las cinco de  la madrugada junto a su compañero del Barcelona Javier Mascherano y  Enzo Pérez, del Valencia. Todos ellos se mantuvieron firmes en  abstenerse de hacer declaraciones, dando continuidad a la protesta  contra el periodismo que iniciaron en noviembre del año pasado tras  la tranquilizadora victoria sobre Colombia.      

Ángel Di María llegó después, inmediatamente antes del  comienzo del entrenamiento.    

El cordobés Dybala, que llegó de Italia con una molestia de  isquiotibial se mantuvo en gimnasio e hizo ejercicios de  kinesiología, a la espera de un último estudio por imágenes para determinar  si hay lesión, que será decisivo para saber si estará afectado al  partido con Chile.    

Si el futbolista de Juventus no puede jugar, la opción natural  es Sergio Agüero. Es el interrogante en torno al equipo que  presentará el entrenador Edgardo Bauza.    

Bauza consideró trascendental este partido ante Chile para las  aspiraciones de Argentina de instalarse en Rusia 2018. Una  derrota podría complicar el horizonte de Messi y compañía ya que el  primer destino a buscar puntos será La Paz, con la complicación que  conlleva para los atletas los 3.650 metros sobre el nivel del mar.    

Ya en campo bajo la conducción del entrenador Edgardo Bauza,  los 24 futbolistas activos (excepción de Dybala) hicieron  movimientos con pelota en una de las canchas del predio mientras los  arqueros Sergio Romero, Mariano Andújar y Nahuel Guzmán trabajaron bajo  las órdenes de Gustavo Campagnuolo.