Los otros Netflix

El futuro de la ficción televisiva parece jugarse en Netflix, Amazon y HBO, servicios pagos con los bolsillos gordos capaces de realizar producciones impensadas para televisión. Pero, ¿dónde se juega el pasado? ¿dónde juegan quienes quieren jugar otro juego? Es decir, ¿dónde entra el cine clásico, el cine europeo, el cine independiente, dentro de las propuestas de estos gigantes que parecen mirar solo hacia la novedad?

El imán de lo nuevo es, en efecto, lo que conduce cada vez más a estos servicios a la carta, que parecen haber deducido que la audiencia está más dispuesta a pagar para obtener contenidos inéditos que para rever viejos clásicos o acceder a contenidos fuera de su zona de confort. Aunque sus cifras de audiencia se mantienen en secreto, estos servicios han ido alejándose de los tratos con los estudios para exhibir su contenido y enfocándose crecientemente en producir ficción propia, libre, además, de las problemáticas que presentan los derechos intelectuales de cada filme, que responden en cada país a diferentes entidades.

El efecto de esta tendencia constituye la principal crítica hacia estos servicios: quienes monopolizan los nuevos modos de ver y forman un nuevo tipo de espectador, están a la vez volviendo más angosto el universo de posibilidades de ese espectador joven, que ya no mira atrás sino que, siempre, espera la novedad.

El cinéfilo, así, se siente marginado de esta revolución de los modos de ver (por supuesto, el reclamo hacia los servicios on demand resulta inválido: no sólo pretenden ofrecer cierta variedad para atraer a una audiencia más diversa, sino que simplemente operan velando por sus intereses). Pero para que el amante del cine, que quiere acceder a clásicos, indies y cine argentino con solo un click, existen alternativas...

Qubit

Aunque dispone de un catálogo lógicamente más pequeño que Netflix, y sin producciones propias, Qubit ofrece a sus usuarios, por una suscripción mensual de 110 pesos, un listado de películas de orígenes más variados y curado con ojo cinéfilo. Un párrafo aparte merece su selección de cineastas clásicos, que incluye cintas de nombres como Woody Allen, Alfred Hitchcock y Brian De Palma: una oferta de cine clásico e internacional que no descuida la más “pochoclera” ficción hollywoodense.

Disponible a través de PC, tablets y celulares y Smart TVs.

Mubi

Videoclub especializado y virtual: se trata de una cineteca en línea que presenta películas de culto, clásicas, independientes y reconocidas internacionalmente, con gran énfasis en el cine europeo. Con suscripciones que parten de los 6 dólares al mes, el servicio pone en pantalla durante un período de un mes diversas películas, renovando constantemente su catálogo con nuevas ofertas y a la vez llevando el placer de visitar un videoclub en busca de novedades al mundo virtual. El actual catálogo incluye a Godard, Varda y Rohmer, entre otros cineastas.

Disponible a través de PC, tablets y celulares y Smart TVs.

Cinemargentino

Cinemargentino ofrece una nueva ventana de exhibición para la producción audiovisual de calidad de nuestro país. En sintonía con los nuevos modos de consumo de entretenimiento, que privilegian internet sobre los medios tradicionales, el proyecto promueve, difunde y facilita, el acceso al mejor cine independiente argentino. Cintas premiadas en circuitos internacionales como “Ostende” y “Salud rural” conviven con obras de Fernando Spiner, Albertina Carri y Néstor Frenkel. Absolutamente gratuita, la plataforma tiene como finalidad empujar el cine nacional.

Disponible a través de PC y SmartTVs.

OdeOn

Una propuesta similar a Cinemargentino, pero apadrinada por el INCAA como una ventana propia para difundir sus estrenos que muchas veces no alcanzan las salas comerciales. Clásicos de la TV como “Verdad/Consecuencia” y “Los Simuladores” pueden visitarse, al igual que importantes éxitos del cine nacional, como “El crítico” o “Dos Hermanos”, de manera gratuita. Ahora, suma un servicio de alquileres para las cintas que se encuentran recorriendo los cines del circuito INCAA 0KM, brindandole a estos estrenos “silenciosos” una pantalla más.

Disponible a través de PC, tablets y celulares.

Los que aún no llegaron

Existen varios servicios en Estados Unidos y el resto del mundo que acercan otros cines al living del cinéfilo. Warner decidió hace dos temporadas subir su catálogo clásico al Warner Archive, al cual se puede acceder a través de una suscripción pero solamente en EE UU, ya que los derechos para los filmes se encuentran vendidos a diferentes distribuidoras según cada país. El servicio más popular de cine clásico es en el norte FilmStruck, que tampoco está disponible en nuestro país y que maneja la prestigiosa colección Criterion. Fandor, en tanto, es uno de los servicios más populares entre los amantes del cine independiente.