Globos de Oro: las mujeres al poder

La temporada de alfombra roja de Hollywood, que culminará el 4 de marzo con la entrega de los Premios Óscar, dio anoche su puntapié inicial oficial: los Globos de Oro, los premios que cada año entrega la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), celebraron su edición número 75 en una velada marcada por las alusiones políticas y los discursos contra los abusos sexuales y la desigualdad en la industria del cine.

De hecho, todos se vistieron de negro en protesta a los abusos sistemáticos en Hollywood (ver Pág. 2) para la ceremonia que tenía como favorita a “La forma del agua”, del mexicano Guillermo del Toro, que terminó desplazada como mejor drama por “Tres anuncios por un crimen”, la gran ganadora de la noche con cuatro premios (estreno el 18 de enero).

Aunque creada por un hombre, a diferencia de la mayoría de las producciones ganadoras, la cinta de Martin McDonagh tiene como protagonista a una mujer (Frances McDormand, mejor actriz dramática), al igual que el resto de las galardonadas: tanto en comedia (“Lady Bird”: llega en marzo) como en TV (“Big Little Lies”, “The Handmaid’s Tale”, “The Marvelous Mrs. Maisel”), las premiadas fueron creadas o protagonizadas por mujeres, y trataron sobre temáticas femeninas y actuales. Los premios reflejaron así el clima de protesta en Hollywood ante la desigualdad de género, que se manifestó en cada discurso de la noche.

Sin introducción musical como es habitual, la ceremonia comenzó con el discurso del presentador Seth Meyers, con alusiones continuas a las denuncias de abuso en Hollywood: “Muchos pensaron que una mujer debía conducir hoy, pero por lo menos sepan que no soy un hombre poderoso en la industria: ni siquiera soy el Seth más poderoso de la gala”, dijo Meyers en alusión a Seth Rogen, y disparó en alusión a Trump: “¿Se acuerdan cuando era Seth Rogen el que se metía en líos con Corea del Norte?”.

Meyers siguió metiendo el dedo en la llaga al disparar que Harvey Weinstein no estaba presente en la gala, y que no se preocupen, “volverá dentro de 20 años, cuando se convierta en la primera persona en ser abucheada en los in memoriam”.

Con un discurso politizado y con momentos incómodos y picantes, de acuerdo a la norma de los Globos de Oro, el presentador marcó el tono para el resto de la ceremonia, repleto de alusiones a la situación que se vive en Hollywood y en EE UU.

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La ceremonia que premia lo mejor del cine y la TV, deslucida y automática, mostró desde los primeros premios que las grandes ganadoras de la gala serían producciones ligadas a la cuestión femenina.

“Big Little Lies” (miniserie, HBO), “The Marvelous Mrs. Maisel” (la comedia de Amazon) y “The Handmaid’s Tale” (drama que se verá en febrero en Argentina), ganaron sus categorías televisivas, con “Big Little Lies” arrasando: entre las miniseries, cerró la noche con cuatro premios, y ganó en todas las categorías en que fue nominada. “Espero que podamos generar cambios con las historias que contamos”, dijo Kidman al recibir el premio a mejor actriz de miniserie. “Fue un honor haber sido parte del cambio tectónico que ocurrió aquí hoy: las mujeres no estamos aquí por la comida”, la acompañó Frances McDormand, mejor actriz de drama en cine.

En los premios de cine, no fue galardonada la chilena “Una mujer fantástica” como mejor cinta extranjera (ganó la alemana “In the fade”, de Faith Akin). Las ganadoras de los principales premios, mejor comedia y mejor drama, fueron “Lady Bird” (dos premios, aunque no estuvo nominada su directora: todos los nominados cineastas fueron hombres; hace tres décadas no gana una mujer) y “Tres anuncios por un crimen”, respectivamente.

El consuelo latino fue el premio a mejor director para Guillermo Del Toro, un nuevo Globo de Oro para directores mexicanos: ya lo ganaron Cuarón e Iñárritu, al igual que el Óscar: ¿será la hora de Del Toro en los Premios de la Academia?