La buena labor de Manu evitó la barrida

Todo parecía indicar que sería el último juego de Emanuel Ginóbili y sus San Antonio Spurs en la actual temporada. Sin embargo, con una gran tarea del argentino (10 de sus 16 puntos en el último cuarto), el conjunto texano superó a Golden State y puso la serie 1-3. El goleador de los locales fue LaMarcus Aldridge, con 22 puntos y 10 tableros. Por el lado de la visita, de poco sirvieron las 34 unidades y 13 tableros de Kevin Durant.

Ahora la serie se trasladará a Oakland, California, donde los Golden State Warriors hacen las veces de local. El quinto punto se disputará el próximo martes por la tarde.

PALABRAS DE APOYO PARA “POP”

En el día del entrenador de básquet (fecha estipulada para homenajear el fallecimiento de León Najnudel, vital para la creación de la Liga Nacional), Emanuel Ginóbili se acordó de Gregg Poppovich.

El entrenador de San Antonio sufrió la muerte de su esposa hace algunos días y en los últimos dos juegos no pudo estar en el banco de los Spurs. Es por eso que el italiano Ettore Messina, ex director técnico de Manu en Bologna, Italia, tuvo que hacerse cargo del plantel. Sin embargo, al finalizar el partido, el bahiense tuvo palabras para con quien es su entrenador en la NBA desde su arribo en 2002: “Es un reto difícil, nuestro líder está sufriendo. Hoy jugamos como si él estuviera y sentimos su empujón anímico como si estuviéramos en su casa”. Con respecto al juego, Manu explicó: “No es un equipo que necesite que nadie lo cargue, tenemos que ayudarnos el uno al otro. Estoy contento con haber anotado en base al trabajo en equipo. Nuestra agresividad fue descomunal”.

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