Gritos, silbidos y banderas contra Mauro Zárate, a quien los hinchas no lo perdonan

La presencia de Mauro Zárate en el estadio José Amalfitani, con la camiseta de Boca, volvió a enojar a los hinchas de Vélez, quienes no le perdonan a quien fuera su ídolo, un pase que todavía sigue agitando las aguas en Liniers.

Con el número 19 en la espalda, el anoche jugador más adelantado del equipo que dirige Gustavo Alfaro, fue repudiado desde que su apellido se escuchó por los altavoces que anunciaron las formaciones de los equipos.

Zárate fue uno de los grandes protagonistas de la previa, y ni bien apareció en la cancha, desde las tribunas bajó el ya clásico “borombombon, borombombon, el que no salta, es un traidor”, con contagió.

Con el juego por comenzar, lo conveniente, o no, que podía resultar para Boca se presencia en el terreno, era parte del pasado, y a diferencia de la anterior visita: la gente no fue tan violenta y Zárate pareció dominar la situación.

Los gritos, silbidos, carteles y banderas que lo tuvieron como destinatario, no parecieron afectar al delantero que en el primer tiempo protagonizó la jugada más peligrosa de los visitantes y en la etapa complementaria volvió a ser una amenaza para Alexander Domínguez.

En el primer ataque a fondo de Boca en el segundo tiempo, Zárate reclamó airadamente un supuesto penal por empujón, y la actitud volvió a calentar los ánimos en un estadio que de ahí en más no paró de abuchearlo.

Este repudio de los hinchas de Vélez a Mauro Zárate parece no tener fin, y después de ensayar algún tipo de disculpas en los primeros tiempos, que no fueron aceptadas, ahora se llegó a un punto que no tiene marcha atrás.

El punto final dentro del partido de anoche se registró a los 25 minutos del segundo tiempo, cuando abandonó la cancha para posibilitar el ingreso de Jan Hurtado en medio de un clima adverso.

Recibió el saludo de Alfaro y palmadas al llegar al banco de los suplentes, al que ingresó tocándose el esc udo de Boca y preguntando si había sido penal el que reclamó en el tramo inicial de la segunda etapa.

CHICAS DE 10

Boca apabulló por 10-0 a Defensores de Belgrano como local y se mantiene como único líder del campeonato femenino de fútbol de Primera División, en uno de los tres partidos que en la víspera le dieron continuidad a la séptima fecha del torneo.

Los goles que marcaron la diferencia: Andrea Ojeda (2), Clarisa Huber (2), Fanny Rodríguez (2), Lorena Benítez, Ludmila Manicler (de penal), Carolina Troncoso y Florencia Quiñones.