El Indio Ortiz metió doble turno a la espera de definiciones que no llegan

Gimnasia sigue a paso firme en la intensa pretemporada llevada a cabo en el predio que la institución posee en Abasto. Y, pese a que en la jornada de ayer las copiosas lluvias complicaron el primer turno, no lo hicieron en el resto de la planificación de un plantel Tripero que tuvo dos sesiones de entrenamiento, tal cual estaba estipulado en el cronograma de la segunda semana de preparación.

gimnasio y táctico por la mañana

El grupo conducido por Darío Ortiz comenzó el martes con tareas dentro del gimnasio de pesas ubicado en el Campus, mientras que luego pasaron al césped sintético del campo de juego “Ángel Mariscal” para realizar distintos trabajos tácticos hasta el descanso. Allí se movieron por un lapso cercano a una hora todos los integrantes del equipo, con los mencionados casos de Víctor Ayala y Matías García, próximos a firmar sus contratos (ver aparte).

Luego de la primera y compleja sesión realizada antes del mediodía, futbolistas y cuerpo técnico almorzaron todos juntos en La Casona, buscando reponer energías y descansar de cara a la práctica de la tarde, más apuntada a lo estrictamente físico.

el turno vespertino, con mayor exigencia

El entrenador Mens Sana comprende de la necesidad de una buena base en cuanto lo físico para una temporada que será intensa y que tendrá al Lobo nuevamente en la lucha por los promedios. Y ante esta situación, el Indio planificó un martes muy exigente, que luego del turno de la mañana, con gimnasio y táctico incluido, concluyó tareas físicas también en las instalaciones de Estancia Chica.

Allí, y comandados por el preparador físico Marcelo Montero, pero con la supervisión del DT, los jugadores Triperos realizaron las clásicas pasadas buscando cada uno su mejor forma física.

De esta manera, y con mucha exigencia por la tarde, el plantel completó un nuevo doble turno, pero con la mente puesta en una semana que culminará recién el sábado.

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Tras el doble turno de ayer, hoy los jugadores se entrenarán sólo por la mañana, y luego almorzarán todos juntos para después disponer de la tarde libre.

Así las cosas, el plantel dirigido por Ortiz podrá pasar gran parte del miércoles junto a sus familiares y amigos, y luego retornar a la que será su “segunda casa” durante toda la pretemporada, el predio de Estancia Chica.

Y es que, tras dicha tarde de miércoles, los jugadores volverán al trabajo en la mañana de jueves y quedarán concentrados hasta el sábado, momento en el que realizarán la primera práctica de fútbol formal dentro de una preparación que se ha visto algo complicada por las constantes lluvias que azotaron la región.

Pese a la importancia de la parte física, el Indio quiere empezar a verlos con la redonda en sus pies.