Expectativa entre los cultivadores locales por la nueva reglamentación

La nueva reglamentación despierta una gran expectativa también entre los platenses que buscan desde hace años la autorización del autocultivo de cannabis para uso medicinal.

Candela Grossi, presidenta de “Cultivo en Familia”, una asociación civil que desde el año 2017 brinda en La Plata talleres y entrega derivados de cannabis como aceites y cremas para quienes las requieran en sus tratamientos, dijo ayer que a partir de la nueva reglamentación, “confiamos en que será más amplio y accesible. No sólo para el cultivador sino para las familias que opten por no cultivar y reciban el cultivo comunitario”

Mamá de 3 hijos (de 14, 7 y 5 años), Candela tiene una historia particular detrás de este producto medicinal.

A Carolina, su hija del medio, le diagnosticaron autismo.

“Fue en el 2016 cuando recurrimos al Hospital Garrahan y comenzamos a investigar. No sabíamos qué nos esperaba. Necesitábamos saber de qué se trataba (el trastorno)”.

Contó que en una red social descubrió que recomendaban para tratar el autismo el uso de aceite de cannabis.

“Lo Googleé y no había información”, contó.

Pero quizás por esas cosas del destino terminó en una charla que le cambió la vida a ella y a su pequeña Carolina.

“Tengo la suerte de tener una amiga en Trabajo Social, y me contó de una charla. Arranqué escuchando cada detalle para saber qué era. Fue así que conseguí una tintura de cannabis y empecé a usarla en la nuca de Caro”.

¿Qué pasó después?: “Veía a mi hija más feliz, más contenta”.

Así fue como en diciembre de 2016 empezó a producir su aceite. “Al verla sentada en la mesa y comiendo dijimos ‘esto va por acá’”. Sobre su primer contacto con el cannabis contó: “Nos regalaron un frasco de flores y un cultivador, amigo íntimo de la familia, el 8 de diciembre de 2016 se tomó un taxi de La Plata a Berisso para enseñarme a hacer aceite. A partir de ahí arrancamos. La nena mejoró su calidad de sueño, te miraba a los ojos, empezó a reconocernos, arrancó el Jardín y le fue muy bien. Tuvo sus momentos pero es lógico”, sostuvo Candela, quien agregó: “Vimos que los profesionales, tanto la psicóloga, como el psiquiatra y el terapista, se dieron cuenta. Fue difícil decirles que la nena dejó la medicación por el cannabis. Pero todos acompañaron y vieron las mejorías de Carolina. Hoy nos siguen acompañando”.

Sobre la nueva ley establecida por Decreto N° 883/2020, publicada ayer en el Boletín Oficial, Grossi dijo que “estaba permitida la importación para epilepsia refractaria. Hoy con esta nueva reglamentación no se nombran patologías, por lo que es abierta y amplia”.

Luego agregó que “habla de prescripción médica. Confiamos en que será más amplio y accesible. No sólo para el cultivador sino para las familias que opten por no cultivar y reciban el cultivo comunitario”.

Por último resaltó que “habla de las farmacias, que es fundamental. Quizás a la gente no le de confianza el cultivador y sí el de la farmacia, o no sabe cultivar. Esta ley es más amable y más accesible para toda la ciudadanía”.