Furia latina: los mensajes políticos y feministas de J-Lo y Shakira armaron lío en el Super Bowl

Era un show de medio tiempo de Super Bowl bien latino, y Jennifer López no dudó en enviar un mensaje político que generó ovaciones y polémicas: J-Lo mostró una capa de plumas con la bandera de la isla en su interior durante su actuación en el medio tiempo del Super Bowl en Miami, meca latina en EE UU, país que bajo la presente administración coquetea con la xenofobia y que según denuncian los boricuas, ha sido negligente a la hora de llevar apoyo a la isla que es parte de la unión de estados, tras el impacto de una catástrofe natural.

Todo esto ocurrió en el marco de un show suntuoso, sensual y que generó también otras polémicas, por ejemplo: ¿fueron las coreos demasiado sexuales para un espectáculo familiar? y ¿quién de las dos artistas protagonistas ganó el show de medio tiempo del Super Bowl, Shakira o J-Lo?

El “polémico” show, desembarco latino en la meca del espectáculo estadounidense, terminó con Shakira y López, cuyo atletismo incansable igualó el de los jugadores de fútbol que esperaban en los vestidores, abrazadas y el público eufórico. Inmediatamente después, sin embargo, comenzó otro debate: ¿quién lo hizo mejor?

Shakira ofreció su versatilidad para el baile y su gracia y seducción natural, lo que para muchos la volvía merecedora de la corona de la mejor intérprete del show: movió las caderas, cantó, saltó, se movió bajo ritmos urbanos, árabes, hizo algo de pop clásico y puso a saltar al público. Jenny del Bloque también realizó un similar repaso por sus éxitos, aunque marcado por coreografías más estridentes: acrobacias de baile del caño, movimientos más potentes que seductores y un mensaje corporal empoderado aparecieron mientras entonaba éxitos desde “Love Don’t Cost a Thing” a “On the Floor”.

Una fue más sutil y seductora, la otra más potente: dos caras de la cultura latina que deslumbraron al público y dividieron a la audiencia a la hora de elegir una ganadora definitiva. Alejandro Sanz lo resumió de esta forma: “Qué absurda pérdida de tiempo crear comparaciones cuando la música está más allá de todo eso. Ayer fuimos testigos de cómo dos estrellas brillaban juntas de tal manera que se convirtieron en esa galaxia única e irrepetible. Fueron ese tipo de luz que no deslumbra, se convirtieron durante 14 minutos en luz de guía y ejemplo de lo que representa la música. Ambas, juntas, no rozan la perfección, la desbordan”.

LA BANDERA Y LA POLÍTICA

El espectáculo también dio que hablar por esa bandera desplegada en el prime time televisivo más importante del mundo por J-Lo. La imagen conmovió a muchos latinos, especialmente a los provenientes de ese Estado Libre Asociado de EE UU, que aun no se recuperan de los efectos del huracán María de 2018 y que han sufrido más de 2.000 temblores en las últimas semanas, mientras siguen protestando contra la corrupción y urgiendo la ayuda de Washington.

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Destacadas figuras puertorriqueñas como la gobernadora de la isla, Wanda Vázquez, expresaron su orgullo por el hecho de que la cantante de origen latino Jennifer López mostrara la bandera puertorriqueña: López, de herencia boricua, se refiere al tema en un mensaje en Instagram en el que asegura que tanto Puerto Rico como Colombia, país de nacimiento de Shakira, estuvieron “muy en alto hoy (en referencia al domingo)” en el espectáculo de medio tiempo de la final de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL).

Jennifer López y Shakira presumieron de orgullo latino en el entretiempo del principal evento deportivo de Estados Unidos, en el que también actuaron las estrellas de la música urbana J.Balvin y Bad Bunny. El espectáculo de 12 minutos fue exactamente lo que ambas artistas habían prometido en una conferencia de prensa, una celebración de la cultura latina y un mensaje de unidad y de esperanza a la infancia, en especial a los niños de las minorías étnicas y demográficas en Estados Unidos.

Un show que fue recibido con emoción por parte de la comunidad artística latina. El cantante puertorriqueño Ricky Martin, por ejemplo, colgó un mensaje en Instagram en el que se podía leer: “¡Que bonita bandera! #SuperBowl. #Latinosrepresenting #halftimeshow”. Y por fuera de las expresiones latinas, la propia cantante estadounidense Lady Gaga calificó a la puertorriqueña Jennifer López y a la colombiana Shakira como “mujeres talentosas”. Gaga decidió no continuar con su mano dura sobre las dos cantantes latinoamericanas, y aceptó que el espectáculo que ambas montaron “fue increíble”.

Pero también hubo voces en contra: en las redes algunos rechazaron la decisión de las artistas de hacer un espectáculo bilingüe. De hecho, Shakira comenzó la porción musical del Super Bowl con la frase: “Hola, Miami”. “Que se vayan a México”, escribió un usuario en Twitter. “Esto es el Super Bowl y estamos en Estados Unidos”, recriminó. Mientras, publicaciones como el diario The New York Time y la revista The Atlantic, de orientación de centroizquierda, aplaudieron a las artistas por haber logrado “la titánica tarea” de representar la diversidad y pluriculturalidad de los latinos en el escenario.

Esos medios y otros resaltaron el segmento del final a cargo de Emme Muñiz, la hija de López y su ex esposo Marc Anthony: la niña de 11 años y otras pequeñas aparecieron en el escenario en un armazón de luz, que inicialmente parecían flores, hasta que un acercamiento de las cámaras permitió interpretar que escenificaban jaulas, que muchos consideraron una crítica a la política de inmigración del Gobierno de EE UU, que incluye separación de familias en la frontera y la detención de niños.

Para aplacar estás discusiones, la propia NFL señaló que la selección de Shakira y J-Lo para el “show” del descanso forma parte de los esfuerzos de la organización para demostrar que sí están a favor de la diversidad cultural. Todo esto después de los escándalos provocados por el movimiento iniciado por el jugador Colin Kaepernick en 2016, quien se arrodilló durante el himno nacional para protestar contra la injusticia racial, y que provocó la ira de Trump.

Y no fue el único lío que generó el baile: la polémica sobre qué quisieron decir Shakira y Jennifer López con su show en el Super Bowl, si sus movimientos y vestidos eran empoderamiento o denigración de la mujer, el uso del español en un evento tan estadounidense o las discusiones sobre quién lo hizo mejor dominaron ayer las conversaciones.

¿EMPODERADAS?

Es que en el “show”, por algunos clasificado de “polémico”, Shakira y JLo iban cambiando piezas de vestuario cada vez más atrevidas, con movimientos que iban desde la sensualidad hasta la sexualidad. El sitio web de noticias de extrema derecha Breitbart News, que apoya incondicionalmente al presidente Donald Trump, ha difundido un video -en el que se juntaron todas las tomas de los movimientos más sensuales de las dos estrellas- con el texto “el ‘strip show’ y el agarre de la entrepierna en el medio tiempo recuerda que la NFL está en contra de convertir a las mujeres en un objeto”. En las redes se vieron también protestas contra el espectáculo, en las que usuarios lo han llamado “obsceno” o que va “contra los valores familiares”.

La polémica estuvo servida: en respuesta, otros han publicado fotos en el mismo “show” de Prince, Michael Jackson y Adam Levine, el cantante de la banda Maroon 5 que se presentó en el Super Bowl en 2019, sin camisa y agarrándose los genitales. “Sobre esto no dijeron nada. ¿Doble mensaje?”, escribió una usuaria, de nombre Jessica Lynn.