Preocupación empresarial por caída de ventas, demoras en el cobro y pago de salarios

Una encuesta realizada entre los CEOs de las principales empresas del país a raíz del párate impuesto por la cuarentena, reveló que la principal preocupación entre ellos es la baja de la demanda y la demoras en las cobranzas que ponen en riesgo, según dicen, la continuidad del negocio y de las operaciones.

Otra de las consecuencias negativas en la actividad económica de la cuarentena impuesta para mitigar los efectos del coronavirus mediante el aislamiento social marcan la preocupación por el pago de salarios, pero también por una posible demora en la cobranza. Y al pronosticar la duración del “parate” en la actividad, lo estimaron entre 2 y 4 meses.

La encuesta se realizó en el país entre hombres de empresa que pertenecen a Vistage, la organización líder mundial de CEOs. El objetivo era evaluar el impacto del COVID-19 a nivel empresarial y para eso se consultó a 265 líderes empresarios, entre números uno, CEOs, altos ejecutivos y dueños de empresas.

El sondeo incluyó 14 preguntas sobre la situación que atraviesa su negocio en tiempos de cuarentena obligatoria debido a la llegada de la pandemia al país.

De acuerdo a la encuesta, se observa que el factor que se considera más importante de afectación a la empresa es la caída de la demanda. Las dificultades más acuciantes son la demora en las cobranzas y la pérdida de ventas, explicaron desde Vistage, que está presente en el país desde el año 2000.

“La visión general de los encuestados refleja preocupación acerca de las variables relacionadas con la continuidad del negocio y las operaciones”, expresó Alejo Cantón, presidente de Vistage Argentina.

LE PUEDE INTERESAR

La Comuna recortará servicios para hacer frente a la crisis económica

LE PUEDE INTERESAR

Refuerzan operativos para evitar las “escapadas” de Semana Santa

EN NÚMEROS

Al ser consultados sobre cuál es el factor que más está afectando a la empresa en este momento, 100 de los 265 empresarios respondieron que su mayor preocupación está en la disminución general de la demanda de sus clientes. Asimismo, al responder sobre las principales dificultades que enfrentará su negocio, el 81 por ciento de los empresarios expresaron que su preocupación reside en la pérdida en las ventas, clientes o aprobación de nuevos trabajos.

En cuanto a la duración de la crisis, las opiniones se concentran en una estimación que ronda los dos y los cuatro meses. De las respuestas se observa que todos los encuestados han tomado diversas medidas para la protección de los empleados, sin embargo, la mitad de los consultados estima que tendrá dificultades para el pago de salarios.

Al referirse a la posible pérdida de ventas y/o clientes, un 31 por ciento de los encuestados estima que caerá 20 por ciento, respecto de lo presupuestado para 2020 antes de que se desatara la crisis por el coronavirus; 20 por ciento afirmó que disminuirá 30 por ciento; 13 por ciento sostuvo que bajará 40 por ciento o más; 23 por ciento estima que caerá 10 por ciento, y 13 por ciento aseguró que no bajará nada.

En lo que respecta a cuánto tiempo creen que su empresa podrá funcionar antes de quedarse sin caja, un 43 por ciento respondió “hasta dos meses”; 26 por ciento, “hasta cuatro meses”; 14 por ciento, “más de seis meses”; 11 por ciento, “hasta seis meses”, y 6 por ciento dice que no tendrá ningún impacto negativo.

“Respecto de este punto, el indicador que a mí personalmente más me preocupa es que el 43 por ciento de los encuestados considera que solamente podrían operar, en estas condiciones, hasta dos meses más, antes de quedarse sin caja”, analizó Cantón.