Versiones cruzadas luego de la muerte de una mujer en el Instituto del Diagnóstico

Una familia denunció a una clínica de la Ciudad por considerar que el centro de salud actuó con “negligencia” en la atención de una mujer hospitalizada por complicaciones derivadas de un cáncer y que falleció después de haber compartido la habitación con una portadora de COVID-19. Las autoridades del establecimiento señalaron que se cumplió con el protocolo sanitario correspondiente y desmitieron la posibilidad del contagio. “El análisis de detección del virus practicado a la paciente que murió resultó negativo”, afirmaron.

Juan Pedro Diez, hijo Ana María Cendagorta, realizó la presentación judicial a raíz del fallecimiento de su madre, que tenía 71 años, y padecía de cáncer de pulmón, una metástasis en el cerebro y estaba en tratamiento de quimioterapia. Según relató el hombre, el 22 de mayo su madre presentó un cuadro de náuseas y vómitos y tuvo que ser asistida por vía intravenosa; el 26 de mayo concurrió al Diagnóstico para someterse a una serie de exámenes y terminó internada.

“No tuvimos la posibilidad de despedirnos de nuestra madre”, contó a EL DIA Diez, quien, en la denuncia judicial dijo que Cendagorta cuatro días antes de haber fallecido se había internado por un cáncer de pulmón y dos días después debió ser aislada por posible contagio de coronavirus, pues una paciente que derivaron a la habitación donde ella estaba presentó síntomas compatibles con el virus.

El denunciante no descartó que el deceso de su madre haya sido por haberse contagiado el virus. Además, la familia de la mujer debe cumplir ahora con un riguroso aislamiento porque al visitar la clínica estuvieron expuestos al virus.

Diez indicó que “la internamos en el Instituto del Diagnóstico, tras recomendación del médico clínico domiciliario para que le colocaran una sonda y empezara a recibir alimentación en ese nosocomio. Al día siguiente ella debería haber vuelto a su casa”.

Según contó en la denuncia el hijo de la paciente fallecida, la mujer que fue internada junto a su madre “mostraba claramente signos de fiebre alta, balbuceaba sin parar”. En ese sentido el hombre añadió que “fueron no menos de cinco las veces que solicité a las enfermeras una toma de temperatura a dicha paciente, era más que evidente que esa señora no estaba bien. Lo mismo me fue informado posteriormente por la cuidadora”.

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“Es una denuncia infundada”

Si bien al menos hasta ayer, de acuerdo a lo precisado por los directivos del Diagnóstico, la institución de salud no había sido notificada por la Justicia en relación a la denuncia, el director Ejecutivo del sanatorio, Gustavo Durán, respondió a la consulta efectuada por este diario que el reclamo es “absolutamente infundado por cómo se dio todo el proceso médico”.

En esa misma línea, Durán contó que ingresó al Instituto una paciente con celulitis e inflamación en una pierna y que al día siguiente se le presentó fiebre a la mujer. “Terminó teniendo COVID -dijo-, pero se la aisló no bien se le detectó el estado febril, como lo indica el protocolo”.

Para los directivos del Diagnóstico, la mayor prueba de que la mujer fallecida no pudo contagiarse durante la internación es que la prueba del COVID-19 “dio negativa”.

Durán, asimismo, remarcó que Censagorta “ingresó con un comorbilidad severa, con una situación viral en sangre. Entró ya muy complicada”.