En una zona caliente, balean la fachada de una comisaría

A menos de una semana para que termine, agosto aparenta ser un mes por demás complicado en materia de seguridad para la amplia zona que se extiende por Villa Elvira, Barrio Aeropuerto, Ponsati y El Palihue. Atracos de motochorros, la captura del “loco de la tumbera”, usurpaciones, conflictos entre bandas narcos, el intento de fuga de un peligroso delincuente y, de forma reciente, el asalto en la vía pública a un hombre que caminaba con su hija menor y la balacera en el frente de la comisaría decimosexta, son los hechos más graves.

Todos ocurrieron en los últimos 25 días y en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el Gobierno nacional. El confinamiento no calmó el accionar de los malvivientes, que ahora tomaron represalias contra una dependencia policial.

Según pudo saber este diario, el ataque de ayer a la seccional de 122 entre 81 y 82 sorprendió a las autoridades. Por fortuna ocurrió pasada la medianoche: el edificio está rodeado por una oficina del PAMI y un supermercado chino. En el comercio, aseguraron los vecinos, “el movimiento de gente es importante”.

Fuentes consultadas refirieron que al momento del incidente en el lugar se encontraba un teniente cumpliendo la función de ayudante de guardia. Eran las 0.05 cuando el efectivo escuchó el sonido de una moto que circulaba por 122. El ruido del escape se fue “acercando” cada vez más hasta que fue reemplazado por el estruendo de dos detonaciones.

Luego se oyó el chirrido de las ruedas en el asfalto y el silencio volvió a cubrir la noche.

El oficial no llegó ni a ponerse a resguardo, pero no sufrió ningún tipo de herida y salió tras unos segundos hasta la vereda. En la pared de la fachada de la comisaría, dos orificios confirmaron su sospecha. Además, en la calle descubrió dos vainas servidas. El peritaje posterior ratificaría que los disparos provinieron de una pistola calibre 9 mm.

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Por la hora y las circunstancias (cuarentena) en que sucedió, está prácticamente descartado que haya testigos oculares del episodio. Sin embargo, los investigadores cuentan con una herramienta que podría resolver esa cuestión.

“Estamos tratando de establecer la identidad del o de los autores, en las próximas horas podemos tener alguna información”, sostuvieron los pesquisas en diálogo con EL DIA. En esa línea, remarcaron que “vamos a analizar el resultado de las cámaras del Monitoreo Público Urbano (MOPU) y de las vecinales”, que aportarían imágenes clave para la resolución del incidente.

Si bien el hecho de por sí es grave, los voceros le “bajaron el precio” y no lo vincularon con ningún caso importante que esté siendo investigado en estas horas. La causa había sido caratulada como “averiguación de ilícito” y fue renombrada como “abuso de arma de fuego”.

Zona de riesgo

Como publicó este diario en su edición de ayer, por la madrugada del domingo en 7 y 605, dos jóvenes de 24 y 29 años (uno de ellos es oficial de la Policía bonaerense y presta servicios en la comisaría Segunda) fueron abordados por sendos asaltantes que circulaban en una moto 110 cilindrada de color blanco. Tras reducirlos, a la víctima menor le robaron el celular, mientras que al policía, que al parecer no se resistió, le dispararon a quemarropa. La bala le rozó el tobillo derecho y fue asistido en el hospital San Martín.

El mismo día, por la tarde, dos motochorros protagonizaron un violento asalto y quedaron filmados. Fue en 117 entre 96 y 97, por donde un hombre y su hija caminaban de la mano, en una calle angosta, de circulación doble. Los ladrones pasaron por su lado, giraron en U y los interceptaron. Entonces el acompañante descendió del rodado, le propinó un culatazo en la cabeza al papá de la menor y le sustrajo lo que tenía a mano. Como el botín era escaso, el atacante le apuntó a la nena en la cabeza. La brutal secuencia terminó con el padre cubriendo a la pequeña con su cuerpo y los sujetos huyendo.

Los investigadores analizan los videos de cámaras de seguridad públicas y privadas

En tanto, el jueves 20 de agosto hubo dos incidentes distintos con el mismo resultado: dos hombres baleados. El primero tuvo lugar en 96 entre 2 y 3, a la 1.30, y la víctima es un policía que se desempeña en la Superintendencia de Seguridad Vial. Conforme relató, dos desconocidos en moto lo atracaron por su moto y, al resistirse, recibió un tiro en el hombro izquierdo. Lo derivaron al hospital San Martín y está fuera de peligro. Poco después, ingresó en el mismo sanatorio un joven de 24 años con una lesión de arma de fuego en el abdomen. La mujer que lo acompañaba manifestó que había sido asaltado en 122 y 604 por motochorros y que, tras llegar a su casa en 124 entre 603 y 604, se desplomó. Mientras tanto, en 121 y 603 se producía un enfrentamiento armado entre dos delincuentes y personal de la Policía Motorizada. El tiroteo terminó con dos detenidos, de 19 y 26 años. Ambos serían los autores de los hechos anteriores.

A estos casos se le suma la “guerra narco” entre los Mujica y los Nuñez, que tuvo un impasse con la detención de varios miembros de las familias. El último de los aprehendidos está acusado de haber asesinado a Jorge Ariel Mujica (44) en la plaza de El Palihue, en marzo de este año. Lo atraparon después de una persecución por los pastizales del barrio la Hermosura, donde el sospechoso tiene un inmueble.