El delito, la violencia y el miedo, la otra pandemia en una Región al rojo vivo

Con o sin armas; de prepo, arrebato o apelando al golpe y las amenazas. En materia de inseguridad todo vale en La Plata, a cualquier hora del día, tanto en el casco urbano como en la periferia.

Prueba de ello es que en las últimas horas ocurrieron varios casos bajo modalidades distintas. Aunque pocos terminaron con detenidos, uno de ellos baleado en un enfrentamiento con un policía que los persiguió tras el intento de robo de una rueda. Otros dos casos fueron muchísimo más brutales, ya que las víctimas terminaron a merced de los intrusos entre las paredes de sus propias casas, mientras que en otros dos hechos los damnificados fueron una mujer que se quedó sin el auto que necesita para trabajar y hacer un tratamiento oncológico y los pibes que, cuando pase la pandemia, esperan volver a una escuela que fue destrozada por vándalos en Berisso.

El episodio más llamativo, sobre todo porque se desarrolló en un par de secuencias, lo protagonizaron dos sujetos que pretendieron robar las ruedas de un auto en Los Hornos y terminaron presos en Abasto, persecución y balacera mediante.

Todo arrancó cuando el dueño de una casa situada en 132 entre 80 y 81 estaba descansando, escuchó ruidos y, por una cámara de seguridad que instaló para prevenir este tipo de situaciones, observó que dos hombres que se movilizaban en un Fiat Siena “trabajaban” en una de las ruedas de su automóvil con un objetivo claro.

“La víctima salió a increparlos junto a un amigo que es policía de la Bonaerense y que presta servicio en el Gran Buenos Aires”, informaron fuentes oficiales, según las cuales hubo una pelea “mano a mano” entre los cuatro, que terminó cuando “uno de los ladrones sacó un arma desde el auto en el que se movilizaban y comenzó a disparar”.

“Previo a identificarse como policía –continuaron los mismos voceros- el hombre, respondió el ataque y un disparo suyo habría provocado una herida leve en el hombro” del delincuente, que pudo escapar junto a su cómplice en el Fiat Siena blanco en el que andaban.

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La versión oficial da cuenta de que el damnificado y su amigo policía decidieron perseguir a los sujetos, mientras pedían ayuda al 911 y daban precisiones de sus movimientos. “Los hechos aún se están clarificando y todo está bajo investigación judicial”, aclaró un jefe policial de la zona, sin pasar por alto que “en la persecución también hubo un intercambio de disparos entre el auto de los ladrones y el de la víctima que los seguía de cerca”, de modo que “no está claro todavía el momento en que se produjo la herida de bala en uno de los aprehendidos”.

Tras un largo recorrido, y con el apoyo de los móviles del Comando de Patrullas y de la comisaría séptima de Abasto, los asaltantes cayeron a un lodazal ubicado en la Ruta 36 y 519, a la altura de Abasto, donde quedaron encajados.

Ambos sujetos, de 31 y 33 años y con domicilio en Avellaneda, fueron apresados por tentativa de robo y abuso de armas. El herido fue derivado al Hospital de Alejandro Korn, donde lo asistieron y le dieron el alta, informaron fuentes del caso.

Del interior del auto se incautó una llave cruz, una rueda y un celular, pero no el arma que se suponía debían tener por el enfrentamiento que mantuvieron con el policía de civil. “Creemos que la descartaron en el escape”, completó el jefe policial, no sin aclarar que fue intensamente buscada.

Apuntó, además, que “por las característica de los sujetos estamos investigando si tienen relación con algunos robos de ruedas de autos estacionados en La Plata”. Por otro lado, se secuestró el arma reglamentaria calibre 9 milímetros que usó el policía de franco y de civil, además de informar del hecho a la Auditoría General de Asuntos Internos. La fiscal en turno, Ana Medina, solicitó el secuestro de todo el material registrado por cámaras de seguridad de la zona.

HASTA LA PLATA DE LOS MANDADOS

Una jubilada de 75 años fue víctima de la violencia en su casa de Altos de San Lorenzo. Un delincuente se coló por una ventana y no ahorró malos tratos para llevarse algunas alhajas y todo el efectivo que había: 800 pesos que tenía la mujer para la comida del día.

Ella misma apuntó que este fue el segundo robo que padeció en poco tiempo en su domicilio de 19 y 80. En el anterior actuaron dos hombres y ahora uno solo. Los tres entraron rompiendo aberturas y a pesar de que la casa tiene rejas y alarma. La jubilada cuestionó la eficiencia de esta medida de prevención por la que paga todos los meses 1.000 pesos. Dijo que la activó y sonó durante un buen rato, hasta que el ladrón la desconectó y siguió como si nada, agrediéndola. La arrastró del pelo por la casa sin parar de pedirle plata. Cuando encontró unos aritos de oro y las alianzas se tranquilizó y decidió irse con el efectivo. Fuentes oficiales no descartaron que el asaltante “sea del barrio” y confirmaron que “no usó armas”.

UNA MAÑANA DE TERROR

Otro que la pasó mal en su casa fue un comerciante. Temprano, se disponía a abrir el local de artículos de limpieza que montó en el garaje de su casa, en 71 entre 13 y 14. El primero que llegó fue un ladrón que le apuntó con un revólver mientras le ordenaba que se metiera para adentro. Luego, se sumó un segundo sujeto.

El comerciante no los contradijo para evitar un desenlace todavía peor. Los intrusos escaparon con más de 20 mil pesos, se informó.

Sucedió alrededor de las 8 de la mañana. El dueño de casa fue encerrarlo en el baño. Además del efectivo que encontraron en una mesa de luz, una caja fuerte y la registradora del local, se llevaron objetos de valor.

Nadie vio para dónde escaparon pero los vecinos se quejaron de que la zona “está picante desde hace rato”, con asaltos violentos a pesar de que “la policía anda, patrulla, pero no alcanza”.

CONTRA NEGOCIOS

Por último, una mujer de 32 años fue detenida en el Microcentro, tras amenazar a la empleada de un local de ropa para robarle dinero, una tarjeta de débito y mercadería. Policías de la comisaría Primera la atraparon en 7 entre 50 y 51, cuando “la reconocieron por el atraco cometido” el miércoles “en un comercio de 8 y 51”, dijo un jefe de la fuerza.

La mujer, domiciliada en Melchor Romero, quedó filmada cuando ingresó al negocio con capucha y barbijo, se mostró interesada en una mochila y luego se acercó a la caja registradora y amenazó a la empleada.

“Quedate quieta, esto es un asalto. Tengo un arma en la cintura. Dame la plata o te quemo”, le dijo a la víctima, de 26 años.

Por otro lado, anoche un sujeto que asaltó a un joven que circulaba en moto por 74 entre 5 y 6, se habría refugiado en un local de las inmediaciones “que tiene un cartel de pollería pero que el acusado usaría para otro rubro”, dijeron fuentes oficiales. La víctima se dirigió de inmediato a la comisaría octava, fueron al comercio indicado y lo aprehendieron después de que la dueña del local se presentó con la llave.

Un intento de robo de una rueda de un auto en Los Hornos derivó en una balacera