Mugre, interrogantes y silencio detrás de las bombas de Meghan y Harry

Aunque desde el Palacio de Buckingham han preferido por el momento no emitir comunicados, y sólo figuras como Kate Middleton y Camilla Parker Bowles se han dejado ver ayer en público con “cara de piedra”, según la prensa inglesa, las repercusiones de la entrevista que Meghan y Harry le concedieron a Oprah Winfrey (emitida el domingo por la CBS) sacudían ayer a los británicos que recién anoche pudieron ver las dos horas de conversación completas de la pareja con la presentadora televisiva estadounidense.

En un relajado encuentro “sin temas prohibidos”, según advirtió la animadora, la pareja describió de manera poco favorecedora la vida en la casa real, que pintó como institución fría y carente de empatía de la que tuvieron que escapar para salvar sus vidas, y dejó un tendal de inquietudes empezando, lógicamente, sobre cómo afectarán estas confesiones a la familia real que ayer digería sin líquido estas inesperadas confesiones.

Según los medios británicos, es poco probable que el Palacio de Buckingham haga algún tipo de declaración, salvo para responder a críticas directas a algunos miembros mencionados personalmente.

Sin embargo, las revelaciones pueden ser devastadoras, ya que Meghan afirmó que no recibió ningún apoyo cuando informó de que tenía pensamientos suicidas.

“Fuera lo que fuera lo que la familia real esperaba de esta entrevista, esto fue peor”

The New York Times

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También las acusaciones de racismo contra un miembro no identificado de la casa real son un tema especialmente sensible en el Reino Unido, que el año pasado fue escenario de grandes protestas del movimiento Black Lives Matter.

Se espera especialmente una reacción del hermano mayor de Enrique, Guillermo, de quien Harry confesó estar “distanciado”, y de su esposa Catalina. Durante la entrevista, Meghan dijo que, al contrario de lo que había publicado la prensa británica, no fue ella quien hizo llorar a Middleton durante un incidente poco antes de su boda, sino todo lo contrario.

Enrique, cuya suegra es negra, prometió no revelar nunca qué miembro de la familia real le había preguntado cómo de oscura sería la piel de su hijo Archie. Sin embargo, Oprah Winfrey dijo ayer que el príncipe Enrique insistió en hacer “saber (...) que no fueron ni su abuela ni su abuelo”.

Meghan afirmó haber pedido ayuda tras haber tenido ideas de cometer suicidio, pero aseguró que “nunca se hizo nada”. Esto plantea la incógnita de con quién se puso en contacto y por qué no recibió más ayuda para adaptarse a las exigencias de la monarquía.

Las declaraciones de la pareja no contribuirán a mejorar sus relaciones con la familia real, muy tensas desde que decidieron abandonar el Reino Unido y dejar sus papeles como miembros de la monarquía. Esto podría incluso llevar a que sus lazos se corten definitivamente.

“La pareja cargó un bombardero B-52, sobrevoló con él el Palacio de Buckingham y descargó su arsenal justo encima”

ITV

Enrique explicó que su padre, el príncipe Carlos -heredero al trono de 72 años- había dejado de contestarle al teléfono durante un tiempo. Dijo que estaba “realmente decepcionado” por su falta de apoyo, pero decidido a fortalecer su relación.

En otro tramo de la entrevista, Enrique sugirió que algún miembro de la familia real estaba celoso de la popularidad de Meghan durante un viaje de la pareja a Australia y Nueva Zelanda en 2018. Este episodio recuerda cuando la princesa Diana eclipsó a Carlos en su propia gira por Australia en 1983, un tema tratado en la última temporada de la serie de Netflix “The Crown”; ayer, la popular serie de la N roja era tendencia en Twitter, una plataforma que se “mofaba” del escándalo real con memes y chistes al respecto.

La duquesa de Sussex se distanció de su padre, el controvertido Thomas Markle, antes de su matrimonio en 2018, y este nunca conoció a Enrique ni a su nieto Archie. Meghan admitió haberse sentido “traicionada” por su papá, quien a pesar de sus pedidos se había vuelto cercano a la prensa.

En medio de las explosivas declaraciones, la pareja anunció que su segundo bebé será una niña, lo que provocó inmediatamente especulaciones sobre el nombre que le pondrían. En las redes sociales, ayer, se instalaba que la pareja homenajearía a Lady Di al ponerle “Diana”.

REPERCUSIONES

“Fuera lo que fuera lo que la familia real esperaba de esta entrevista, esto fue peor”, afirmó The Times, tras la transmisión de la entrevista. “Meghan tuvo tendencias suicidas. Estaba preocupada por su bienestar psicológico. Lloró en un acto oficial. Y la familia real no ayudó”, agregó el periódico.

“La pareja cargó un bombardero B-52, sobrevoló con él el Palacio de Buckingham y descargó su arsenal justo encima”, afirmó por su parte el canal británico ITV, que compró los derechos para retransmitir las dos horas de entrevista en el Reino Unido.

Para la radiotelevisión pública BBC, “es una entrevista devastadora” que revela “las terribles presiones dentro del palacio” y dibuja “la imagen de individuos insensibles perdidos en una institución” tan perdida como ellos.

“Siempre he sentido la mayor admiración por la Reina... No comento los asuntos de la familia real...”

Boris Johnson

Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, expresó ayer que “siempre he sentido la mayor admiración por la reina y por el papel unificador que desempeña en nuestro país y en toda la Commonwealth” y agregó: “No comento los asuntos de la familia real y no tengo intención de hacerlo hoy”.

La estrella del tenis Serena Williams, una amiga que asistió a la boda de Enrique y Meghan, escribió en Twitter que las palabras de la duquesa “muestran el dolor y la crueldad que ha sufrido”. “Las consecuencias para la salud mental de la opresión sistémica y la victimización son devastadoras, aislantes y con demasiada frecuencia, letales”, sumó.

Peter Shilton, el arquero inglés al que Diego Maradona le convirtió el gol conocido como “La Mano de Dios”, hizo arder las redes al tuitear: “Creo que Harry y Meghan están a punto de sentir la ira de nuestra nación. Muchos británicos y nuestra prensa querrán defender y proteger a nuestra Reina. ¡Creo que miles estarán unidos detrás de nuestro soberano!”