El PJ bajó varias listas y les despejó el camino a algunos pesos pesados del Conurbano

La presión de los intendentes se hizo sentir. Varios pesos pesados del PJ del Conurbano pusieron el grito en el cielo porque distintos sectores del oficialismo los desafiaban a internas y finalmente lograron el objetivo de desactivarlas.

Es que, con distintos argumentos, la junta electoral del Frente de Todos decidió no habilitar varias nóminas que amenazaban con desatar duras internas en los distritos.

Dicen que Cristina Kirchner no quería ruidos en la Provincia y por eso mandó a La Cámpora a cerrar un acuerdo en Hurlingham con el intendente Juanchi Zabaleta luego de presentar una propuesta para retarlo en las urnas. Esa fue la primera señal en el sentido de que otras listas podrían no contar con habilitación para ir a las Paso. Y eso fue lo que finalmente ocurrió.

En Merlo, por ejemplo, el intendente Gustavo Menéndez era desafiado por su enemigo político número uno: el ex alcalde Raúl Othacehé. Pero la lista del “Vasco” no pasó el filtro. Esa nómina fue objetada por “avales insuficientes”, según trascendió.

“Parece un partido soviético”, se quejó Othacehé. Y disparó contra Hugo Curto, integrante de la Junta Electoral que tomó la resolución. “La Junta tiene que verificar los recaudos legales pero no tiene facultades para bajar la lista. Voy a denunciar a Curto”, disparó el ex alcalde de Merlo.

Lejos de darse por vencido, Othacehé aseguró que irá a la competencia con “boleta corta”, es decir, sólo con el tramo de candidatos a concejales sin los cuerpos de legisladores provinciales y nacionales que sí podrá utilizar Karina Menéndez, la hermana del intendente que encabeza la lista de concejales oficial.

En el caso de La Matanza, el beneficiado es Fernando Espinoza. Acaso previendo que lo iban a desafiar, se anotó como primer concejal en su lista. Pero la Junta Electoral del Frente de Todos le despejó el camino al bajar las dos listas opositoras que lo querían retar.

Una era encabezada por Daniel Dauria, integrante del Centro de Comerciantes de San Justo, apoyada por el titular de la Uocra local, Heraldo Cayuqueo.

La otra lista hacía más ruido: era la que lideraba la actual diputada provincial María Laura Ramírez, una ex funcionaria del municipio que llegó a la banca con el apoyo de Espinoza pero que luego se distanció del intendente.

Algunas versiones indican que tenía cierto apoyo de La Cámpora.

En el caso de Avellaneda, el distrito del ministro de Hábitat, Jorge Ferraresi, el que se quedó sin lista fue Jorge Calzoni, rector de la Universidad de Avellaneda. La única nómina habilitada es la que lidera Magdalena Sierra, esposa de Ferraresi.

OTROS CASOS

Una situación similar se produjo en Moreno, donde gobierna Mariel Fernández, una dirigente cercana a los movimientos sociales pero con buena sintonía con La Cámpora.

La Junta Electoral pasó el lápiz rojo sobre sus tres desafiantes: Ramón Vera, José Luis Barreiro y Eduardo Russo.

Una de las pocas internas que quedó en pié es la que se librará en José C. Paz, donde gobierna Mario Ishii, aún internado por coronavirus. Quizás tenga que ver con que dos están vinculadas al oficialismo. La “oficial” que lidera Roque Caggiano y la que encabeza Mariana Avila, esposa del diputado provincial José Pérez. La última oferta, sin vinculación con la comuna, es la que inscribió como primer candidato a Rodrigo Barrios, referente de los movimientos sociales.