Gimnasia necesita dar señales de vida nada menos que frente a River
Edición Impresa | 22 de Agosto de 2021 | 03:37

Tanto para Gimnasia, eliminado en la Copa Argentina, el gran objetivo del semestre, como para River, afuera de la Copa Libertadores, su principal frente de atención, el partido que los cruzará hoy en el Bosque será un nuevo punto de partida en la Liga Profesional, el torneo que les queda a ambos de aquí a fin de año.
El encuentro, que aparece entre lo más destacado de la séptima fecha, comenzará a desde las 20:15 en el estadio Juan Carmelo Zerillo, tendrá a Pablo Dóvalo como árbitro y será televisado en directo por TNT Sports. Además, el mismo podrá seguirse por la clásica Supertransmi de FM La Redonda, en el 100.3 del dial.
Por necesidad, entendiéndose esto a causa de lesiones y suspensiones, como por decisión de los entrenadores que buscarán una superación en el juego, ambos equipos presentarán variantes, tanto considerando la fecha anterior como las mencionadas actuaciones coperas.
La posible presencia de Luis Rodríguez ha sido sobre lo que más prestó atención la dupla técnica en Gimnasia, aunque no lo único, pues el análisis después de las derrotas lamentadas frente a Colón, como ante Argentinos, en la Copa Argentina, abarcó un repaso por todas las líneas, por lo que también aparece una duda ofensiva entre Domínguez y el recientemente incorporado Holgado.
En el caso de River, la primera cuestión que debió atender Gallardo fue la lesión de Fabrizio Angileri, el lateral que resulta una de las principales armas de ataque. Una baja que se sumó a la de Gonzalo Montiel, de similares características, que dejó el plantel tras ser transferido.
De local, el Lobo empató 2-2 contra Platense y venció 1-0 a Rosario Central y Atlético Tucumán
Por el contrario, el Millonario tendrá la posibilidad de recuperar a Enzo Pérez en la línea de medios. El mendocino quedó afuera del equipo que viajó a Brasil, aunque por estar suspendido, y ahora reaparecerá para su equipo.
Las derrotas de la semana, que significaron una frustración muy grande tanto en Gimnasia como en River, encendieron luces de alarma, al punto que mientras para Messera-Martini el margen de error se redujo, Gallardo aclaró que a fin de año evaluará su continuidad o no en Nuñez.
El Lobo llegó hasta aquí tras dos empates, contra Platense y Racing, dos triunfos ante Central y Atlético Tucumán, y dos caídas, frente a Defensa y Colón, más el apuntado traspié sufrido con Argentinos por Copa Argentina. Pero los cuestionamientos a la conducción técnica transitan por otros caminos, como el que indica que el equipo no aparece y el juego tampoco. Llamativo, más porque la gestión, que comenzó en forma interina, se había caracterizado por un formato general que colmó las expectativas y generó ilusión de crecimiento.
La renovación del plantel que se produjo en el receso evidentemente significó varios pasos atrás en el crecimiento futbolístico de un conjunto albiazul que en estos términos aparece necesitado de ofrecer señales de vida en una semana que continuará como visitante de Lanús, el miércoles y local de Huracán, el sábado.
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