Feroz ataque a una familia de San Carlos por "instalar cámaras": "Estamos presos en nuestra casa"

Sumido en una profunda incertidumbre y preocupación por el "duro e injusto" presente que vive, un vecino se comunicó en las últimas horas con este diario para hacer pública la situación que atraviesa desde mediados de agosto cuando un grupo de personas ingresó a su propiedad y, tras atacar con un arma blanca a su sobrina, provocaron serios destrozos en su casa ubicada en 148 y 47 y dañaron su vehículo. Pero, según afirma el hombre, los daños y las heridas que sufrió la joven no se comparan con la angustia que provoca saber "que pueden volver en cualquier momento"

Para conocer el trasfondo de esta situación hay que remontarse al 16 de agosto cuando el vecino, que pidió mantener su identidad a resguardo por temor a represalias, tomó la determinación de instalar cámaras en su propiedad. Pensó que se trataba "de una buena idea sumar seguridad" a su domicilio ante las escalada de delitos que vienen teniendo lugar en la Región pero jamás imaginó que aquella decisión le terminaría significando la "aflicción más grande su vida". 

Según explicó en diálogo con este diario, este conflicto se inició con un cruce verbal entre su sobrina y un vecino lindero que le reclamó por la instalación de las cámaras. "El tipo insultó a mi sobrina y ella le respondió. El tipo se fue y mi sobrina pensó que todo había quedado ahí. Pero no. Al rato vino él con un palo y su esposa con un cuchillo. La mujer, con el arma en la mano, le empezó a pedir explicaciones a mi sobrina sobre el cruce y todo se desmadró", señaló el hombre. 

Aparentemente a la esposa del vecino no le alcanzaron las explicaciones de la joven y decidió cruzar el portón. El vecino expuso que "mientras mi vecino esperaba afuera de su propiedad, la mujer enardecida ingresó y comenzó a provocarle cortes a su sobrina". No hizo más que describir las imágenes que fueron captadas por las cámaras de seguridad instaladas en su casa. En el clip se puede ver cómo una mujer ataca a otra con un elemento que en principio sería un cuchillo. 

Producto de ese ataque, la joven terminó con varios cortes en distintas partes del cuerpo. Afortunadamente para ella, ninguno de los puntazos que recibió revistió una gravedad mayúscula aunque debió concurrir a un centro de salud ya que una de las heridas requirió algunos puntos de sutura. Tras recibir las curaciones pertinentes, la chica regresó a su casa pesando cómo sería el día después en lo que respecta a la convivencia con sus vecinos. 

A esa altura, en la finca en la que había acontecido el ataque a cuchillazos nadie se imaginaba que dicha agresión sólo era la punta del iceberg de una jornada signada por la violencia. Según consta en la denuncia, promediando las 17hs, se presentó en su casa un grupo de 10 personas con los rostros tapados. "Todos tenían puntas y cuchillos. Entraron a mi terreno e intentaron entrar a mi casa pateando una puerta. Como nadie salió empezaron a destruir mi auto. Por cámara veía como lo desmantelaban, literal", revivió el hombre. 

Después de casi 15 minutos de furia, los individuos se retiraron del lugar. Además de los destrozos, en el lugar dejaron sembrado un clima de angustia y temor. El vecino contó que las amenazas que lanzaron los sujetos lo mantienen a él y a su familia hasta hoy confinado en su casa. "Tenemos miedo. No puedo ni si quiera salir a hacer las compras. Prácticamente estoy preso en mi casa. Pero es peor que estar preso porque casi no duermo. Todo el tiempo estoy mirando las cámaras porque temo que en cualquier momento pueden volver y entrar por el fondo", sostuvo. 

El vecino manifestó que necesita que la justicia actúe rápidamente y le brinde una solución. "En la denuncia pusieron 'autores ignorados' y yo conozco bien a los tipos que vinieron a atacar mi casa. La fiscalía me tiene que tomar declaración y proceder antes de que sea demasiado tarde", señaló.